El Mundo Dice GrisMuestra
Pecados tolerados
La lista de pecados tolerados por la sociedad es extensa pero consideremos uno de los pecados tolerados de mayor impacto: las reacciones de ira.
Es imposible conciliar la idea de que un cristiano, ante las situaciones de esta vida, reaccione con un enojo desmedido e insultante, de la misma forma como lo hace una persona que no conoce el amor de Dios. Cuando esto sucede la «luminaria» se funde con las tinieblas.
Otro pecado tolerado de mayor impacto es la ética situacional.
«El fin justifica los medios».
«No me quedó otra alternativa».
«Me vi obligado a hacerlo».
«El Señor sabe que no fue mi intención».
En la actualidad estas son expresiones muy comunes, las cuales dejan a un lado las ordenanzas bíblicas. Cuando esto ocurre el hombre sigue su propia voluntad bajo una máscara de víctima.
Esta fue la escuela de Saúl, cuando Dios le pidió que destruyera a los amalecitas y en vez de ello usurpó el papel del sacerdote Samuel «al ministrar sacrificio» desesperadamente a Jehová (1 Samuel 13, 15).
El evangelio es el lugar menos indicado para imponer la voluntad humana. Por muy extremo que parezca el mandato divino, el patriarca Abraham nos enseña que vale la pena obedecer.
Si recordamos el recuento bíblico sabemos que cuando Abraham estuvo a punto de sacrificar a su único hijo, Isaac (Génesis 22:118), lo menos que debe haber hecho fue tener en poco la pérdida de su hijo. Esto nos hace entender claramente que no hay circunstancia que tenga el peso suficiente para desobedecer a Dios.
Acerca de este Plan
Cuando el cristiano se mezcla con las prácticas de este siglo presente, creamos un área gris donde distorsionamos la verdad, comenzamos a tolerar ciertas actitudes y situaciones, lo cual nos lleva a una obediencia parcial y conveniente en vez de íntegra y absoluta. Por consecuencia, nuestro testimonio se degrada, y por ende, el evangelio sufre daños. Este plan de lectura nos ayuda a ver áreas que quizás se hayan convertido en puntos ciegos y nos recuerda la importancia de la obediencia y el poder de nuestro testimonio.
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Nos gustaría agradecer a José García y Church of God of Prophecy por facilitarnos este plan. Para obtener más información, por favor visítenos en: http://iglesiadediosprofecia.org/