Sentirse mejor: Devociones de Tiempo de Gracia Muestra

Mi Mente: Me siento tan deprimido Todo el mundo se siente abatido de vez en cuando, todo el mundo tiene sus bajones; pero eso no es depresión. La depresión es una prisión diaria de odio a sí mismo, una vida con largos tramos de horrible oscuridad. El lugar más oscuro de todos para un cristiano es el temor de que haya sido Dios quien le envió la aflicción. ¿Se ha convertido Dios en mi enemigo? ¿Cómo podría tener éxito en mi vida si el poder que hay detrás de todo está en mi contra? ¿Alguna vez ha pensado algo como esto: “Me has puesto en el hoyo profundo, en tinieblas, en lugares profundos” (Salmo 88:6)? No se debe discutir con las personas deprimidas sobre su depresión; no se las puede avergonzar, recriminar, ni regañar por esa causa. La luz en sus lugares más oscuros debe venir de la cruz de Cristo; puesto que Dios lo castigó por todos los pecados de usted, ya no queda ira en su contra. Si Dios no escatimó a su Hijo para recuperarlo a usted, entonces debe ser verdaderamente valioso para él. “Jah, si miras los pecados, ¿quién, Señor, podrá mantenerse? Pero en ti hay perdón” (Salmo 130:3,4). Si tengo el perdón, tengo esperanza. Dios está trabajando en mi favor. Mañana será mejor.Mi Mente: Me siento tan deprimido Todo el mundo se siente abatido de vez en cuando, todo el mundo tiene sus bajones; pero eso no es depresión. La depresión es una prisión diaria de odio a sí mismo, una vida con largos tramos de horrible oscuridad. El lugar más oscuro de todos para un cristiano es el temor de que haya sido Dios quien le envió la aflicción. ¿Se ha convertido Dios en mi enemigo? ¿Cómo podría tener éxito en mi vida si el poder que hay detrás de todo está en mi contra? ¿Alguna vez ha pensado algo como esto: “Me has puesto en el hoyo profundo, en tinieblas, en lugares profundos” (Salmo 88:6)? No se debe discutir con las personas deprimidas sobre su depresión; no se las puede avergonzar, recriminar, ni regañar por esa causa. La luz en sus lugares más oscuros debe venir de la cruz de Cristo; puesto que Dios lo castigó por todos los pecados de usted, ya no queda ira en su contra. Si Dios no escatimó a su Hijo para recuperarlo a usted, entonces debe ser verdaderamente valioso para él. “Jah, si miras los pecados, ¿quién, Señor, podrá mantenerse? Pero en ti hay perdón” (Salmo 130:3,4). Si tengo el perdón, tengo esperanza. Dios está trabajando en mi favor. Mañana será mejor.