¿Cuál es tu proyecto?

Mucha gente quiere hacer todo tipo de cosas por Dios. Tenemos nuestras ideas de lo que a Dios le gustaría y con plena devoción nos dedicamos a ello. A menudo no se trata ciertamente de cosas equivocadas, pero podemos plantearnos la pregunta de si el "proyecto" con el que estamos tan plenamente comprometidos es también el proyecto de Dios. Si le hicieras a Dios ahora mismo -hoy- la pregunta: "¿Cuál es tu proyecto?", ¿qué te diría?

Hacer esta pregunta es, por supuesto, peligroso, porque no queremos poner palabras en la boca de Dios, pero en Hechos vez un "proyecto" en el que Dios está trabajando con especial amor. Me refiero a la "iglesia". La Iglesia. El grupo de personas que creen en Jesús, le siguen y son Sus discípulos. Que juntos reflejan algo de Quién es Él. Me imagino que Dios tiene muchos proyectos, pero que este "proyecto" tiene un valor especial para Él. Después de todo, ¿el Padre dio a Su Hijo para ello? ¿Le prometió Su Espíritu Santo?

En este episodio de Los Elegidos, encontramos a un hombre - Natanael - que tiene muchas ganas de construir una casa para Dios, una sinagoga. Un lugar de culto. Un lugar de oración. Qué hermoso deseo. No puede ser lo bastante hermoso para él. Qué fiasco debió de ser cuando todo su sueño, toda su estructura se vino abajo.

Tal vez tú sientas lo mismo a veces. Tienes tantas ganas de hacer esto o aquello por el Señor, y con pleno empeño vas a por ello. Pero en lugar de que las cosas fructifiquen, parece que se rompen bajo tus manos. "¡Cómo, pues, Señor!" - puedes exclamar. Todo esto podría haber sido tan hermoso.

Ante todo, al Señor no le preocupa lo que puedas hacer por Él. Se trata principalmente de que Él se encuentre contigo.

Y a partir de ese encuentro con Jesús, puedes seguir el camino con Él.

En el camino, existe la posibilidad de que Jesús te dé un papel en Su gran proyecto.

Un lugar de culto.

Un lugar de oración.

Un lugar de encuentro.

Un lugar de curación.

Un lugar de confort.

Un lugar de libertad.

Un lugar.

Reflexiona sobre las siguientes preguntas:

• ¿Qué te gustaría hacer por el Señor?
• ¿Te reconoces en el Natanael de Los Elegidos?
• ¿Lo has experimentado alguna vez, cuando parecía que las cosas se rompían bajo tus manos, cuando estabas tan ansioso por hacer algo para el Señor? ¿Qué te hizo eso?
• ¿Qué lugar te ha dado el Señor?

Ora: "Señor, mis manos están abiertas. Estoy disponible. Puedes poner y quitar lo que sea necesario. Quiero servirte. Quiero dedicarme a Tu 'proyecto'. ¿Me mostrarás dónde y de qué manera puedo hacerlo?

Señor, mis manos están abiertas. Abiertas, llenas de adoración. Abiertas para consolar y tocar. Abiertas para ayudar. Aquí están mis manos Señor - me gustaría usarlas para Ti. Amén".

Este plan de lectura ha sido creado por Alongsiders Europa y Jesus.net siguiendo la serie "Los Elegidos". Nuestro objetivo es ayudarte a empezar con la serie.

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