Venciendo El MiedoMuestra

Entender el miedo

Una de las claves para vencer el miedo es poder responder a esta pregunta: ¿Qué es el miedo?

La definición de miedo en el diccionario es: “Sensación de angustia provocada por la presencia de un peligro real o imaginario”. Esta última palabra es fundamental “imaginario”, porque la gran mayoría de nosotros nunca nos encontramos con aquello que más tememos.

Según un psicólogo alemán, los cinco miedos principales que todos compartimos en menor o mayor medida y de los cuales se derivan casi todos los demás miedos, son los siguientes:

1. La muerte; por nuestro instinto de supervivencia.

2. La pérdida de la autonomía; o sea miedo a ser inmovilizados, claustrofobia, ser encarcelados, etc.

3. La soledad; por abandono o rechazo.

4. La mutilación o enfermedad; tener límites en nuestra movilidad o perder algún órgano.

5. La muerte del ego; el miedo a ser humillados o pasar vergüenza.

¿Has experimentado alguno de estos miedos en tu vida?

Yo debo reconocer que, en los últimos años, me he visto confrontado con varios de estos miedos. En mi rol de papá, vivo imaginando los peores escenarios: cuando mis hijos se enferman, sufren algún golpe o están haciendo algo peligroso.

Por eso el Salmo 56:3 me resulta alentador: “Cuando siento miedo, pongo en ti mi confianza". Me encanta, porque David lo escribió mientras estaba huyendo porque Saúl lo quería matar.

Imagina ser perseguido todo el tiempo, en constante peligro. Definitivamente David debió luchar contra el miedo, pero al darse cuenta de sus temores, recordaba que podía confiar en Dios.

Sabes, es igual para ti y para mí, en momentos cuando el miedo llega por cualquier razón. Ya sea una situación de enfermedad, por estar fuera de nuestra zona de confort, experimentando soledad, o luchando contra miedos irreales que solo están en nuestra mente. En cada momento podemos enfocar nuestra mente en Cristo y saber que podemos confiar en Él.

En conclusión podemos afirmar que el miedo es la falta de confianza en Dios. Por eso hoy te invito a decirle a Dios junto con David: “pongo en ti mi confianza”.

¿Estás listo hoy para confiar en Dios de esta manera?