Confiar en Dios en Todo MomentoMuestra

Cuando Dios nos envía a una aventura desconocida.

En la vida hay cosas que nos suceden muy extrañas y que a menudo no logramos entender en el principio, pero conforme pasa el tiempo podemos ver cuáles eran los propósitos de Dios con esa aventura.

En el libro de Génesis, encontramos una historia muy interesante sobre una aventura que Dios le encomienda a un hombre llamado Abram. Resulta que este hombre se encontraba muy cómodo en su tierra, tenía buenos bienes materiales, estaba casado con una mujer muy bella y estaba rodeado de sus parientes; en pocas palabras no tenía necesidad de nada. Pero resulta ser que un día a ¡Dios! Se le ocurre hacerle una invitación media extraña a este hombre [llamado Abram] resulta que Dios le pide que salga del lugar donde él reside y que se vaya a un lugar desconocido <<que invitación más loca le estaba haciendo Dios a este pobre hombre>> Dios solo le dijo a Abram que recogiera sus cosas, se despidiera de sus parientes y se fuera aquel lugar, que él no conocía, eso sí se fue con su esposa Saray. Dios no le dio un mapa, un teléfono inteligente que tuviera la aplicación waze, para que se guiara, no ¡Dios solo le dijo que agarre sus cosas y salga de aquel lugar!

En medio de aquella travesía; Abram le tocó hacer muchas cosas medias extrañas, como decirle a su esposa Saray, que declarara que ella no era su esposa; sino su hermana, para que no lo mataran, le tocó dormir en el desierto en una carpa, ir a rescatar a su sobrino que lo habían raptado y lo más loco de este tema << que iba a tener un hijo propio y sería padre de una gran nación>>. Por cierto, nos falta agregar algo más a esta loca aventura ¡Abram ya tenía 75 años de edad, no era un jovencito!

¡Pero si de algo sí podemos estar seguros es que ¡Abram… siempre confió en Dios en todo momento! Si quieres saber cómo termina esta historia te invito a leer el libro del principio en el capítulo 12.

Oración.

Padre Celestial en este momento te queremos dar gracias por todas las cosas maravillosas que Tú nos das. Hay momentos en nuestras vidas, que no entendemos cuáles son tus planes, en nuestras vidas. Pero conforme aprendemos a confiar de todo corazón y a esperar en ti, podemos ir viendo con el tiempo; cuáles eran esos planes para nuestras vidas. Muchas gracias precioso Dios y ayúdanos a confiar en ti en todo momento, amén.