¿Cómo Sigues a Jesús?Muestra

Llamado a ser un discípulo de Jesús

Has tomado la decisión consciente de entregar tu vida a Jesús. Una decisión de seguirlo y hacerlo Señor de tu vida. Esa decisión tiene consecuencias, porque, aunque hemos recibido todo por gracia, Jesús aún te pide algo:

Dedicar toda tu vida a Él (Romanos 12:1 y Mateo 16:24).

Que comiences a confiar plenamente en Él y seguirlo como Maestro.

Él desea ser el Señor en "todos los aspectos" de tu vida.

Él quiere verte como Su discípulo.

Porque no solo eres salvo para estar en el cielo para siempre y para el perdón de tus pecados.

No, eres salvo para marcar la diferencia.

Para dejar que Su luz brille.

Para ser Sus 'manos y pies' aquí en la tierra.

Para ser Su embajador y traer el 'Reino' aquí en la tierra, en Su nombre.

Ya no te perteneces, ahora le perteneces a Él.

Tú eres Su novia. Él te ha comprado por un precio (1Corintios 6:20) con Su preciosa sangre que derramó sobre el altar del Dios Vivo por ti (1Pedro 1:18-19).

La única razón para eso, y por qué aún vivimos ahora, es Jesús. Es para caminar en Su voluntad en nuestra vida, para que el Padre pueda ser glorificado en nuestra vida.

Ya no debemos vivir para nosotros mismos.

Ya no se trata de mi voluntad, sino de la voluntad de Él.

Tengo que menguar, para que Él crezca.

Mateo 16:25:
Porque el que quiera salvar su vida la perderá; pero el que pierda su vida por mi causa, la encontrará.

Cuando eliges poner tu vida en el altar para el Señor, encuentras la vida sobrenatural.

La vida que Él ya derramó durante tu renacimiento. Una vida para la honra de Dios, de abundancia, amor, prosperidad, restauración y mucho más.