Héroes De La Fe - Parte 2Muestra

Valora lo espiritual

Héroe: Isaac - Génesis 25:19-34, 27:1-40, Hebreos 11:20

Versículo temático: Marcos 8:36

La semana pasada aprendimos a pasar la prueba. Hoy aprenderemos a valorar consistentemente las cosas espirituales más que las cosas físicas.

El hijo de Abraham, Isaac, creció y tenía una familia propia. En lugar de elegir una esposa para sí mismo, permitió que su padre la eligiera (Génesis 24). Entonces Isaac y su esposa Rebeca tuvieron gemelos, Esaú y Jacob.

Un día, Esaú llegó a casa después de cazar y estaba tan hambriento que pensó que iba a morir. ¡Anhelaba tanto algo que daba cualquier cosa por ello! ¿Has querido tanto algo que harías cualquier cosa por ello? Jacob decidió engañar a Esaú. Dijo que le daría algo de comida a Esaú a cambio de su primogenitura, ¡y Esaú aceptó! ¡Alteró todo el curso de su vida por un solo plato de sopa!

En aquellos días, los padres bendecían a sus hijos antes de morir. Isaac envejeció y perdió la vista y planeó bendecir a Esaú. ¡Pero Jacob siguió el consejo de su madre, se vistió como Esaú y engañosamente tomó la bendición! Esaú pensó que un plato de sopa no supondría una gran diferencia, pero cuando quiso recuperar su derecho de nacimiento, ¡no pudo recuperarlo! ¡Lo perdió permanentemente!

Isaac valoró las cosas espirituales. Creyó en la promesa de Dios de que sus descendientes poseerían la tierra, y bendijo a Jacob con esas promesas.

Dios tiene un derecho de nacimiento, un plan y bendición para cada uno de nosotros. ¡Pero si no tenemos cuidado, podemos cambiar el plan con nuestras elecciones! Una forma de hacer esto es pecar. Cuando mientes y dices que obtuviste una calificación más alta que la que obtuviste, puede que te veas bien por un corto tiempo, ¡pero has perdido tu credibilidad! Anteriormente, Buzz planeaba tomar la moneda de su abuela, pero Peppy entró a la casa y salvó el día. Ella le dijo que su alma es mucho más valiosa que una moneda, y él devolvió la moneda.

Cuando creces, se vuelve aún más arriesgado. Muchos cristianos se casan con alguien por apariencia o estatus en lugar de preocuparse por el corazón de la persona. Entonces, cuando quieren servir a Dios, su propio cónyuge se interpone en el camino. ¡Y la decisión de con quién te casas es permanente! Esaú se casó con mujeres que volvieron locos a Isaac y Rebeca (Génesis 27:46). Por el contrario, Isaac y más tarde su hijo Jacob valoraron lo espiritual al elegir un cónyuge.

Jesús dijo que las preocupaciones de esta vida y el engaño de la riqueza pueden impedirte ser fructífero, y recibir tu primogenitura (Mateo 13:22). Asegúrate de no despreciar tu derecho de nacimiento y cambiarlo por cualquier otra cosa, sin importar cuánto lo anheles.

Elijo valorar las cosas espirituales de la vida más que las cosas físicas.

Preguntas:

1. ¿Cuáles son otros ejemplos donde mostramos que valoramos más lo físico que lo espiritual?

2. ¿Qué tal si no te gusta hacer lo que parece correcto?

3. ¿Qué tal si soy el único no participando?

Aplicación a la vida:

Tu tarea esta semana es escribir sobre tu derecho de nacimiento, la vida en la que puedes crecer. Primero, no pienses que el derecho de nacimiento de tu familia no es nada. Tiene mucho valor. Puede ser como mecánico o ingeniero, o enfermera. Puedes marcar la diferencia en tu vecindario o en tu país. Pero escribe sobre tu derecho de nacimiento espiritual también. Eres un hijo de Dios y perteneces a su poderosa familia. Dios te ha dado varias habilidades y deseos, y él puede trabajar a través de ellos para llevarte al éxito en tu familia espiritual. Puedes mostrarle esto a tu maestro(a), pero no es necesario. Tu corazón es precioso para Dios.