En La EsperaMuestra

La preparación de la novia

La espera de la novia es un llamado a la santidad. En el mundo antiguo, una novia pasaba por un periodo de preparación antes de su boda, cuidando su apariencia, preparando su vestido, y manteniéndose pura para el día tan esperado. De manera similar, la Iglesia está llamada a una vida de santificación, limpiando su corazón y viviendo según los mandamientos de Cristo.

Efesios 5:25-27 nos dice que Cristo amó a la Iglesia y se entregó a sí mismo por ella "para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua con la palabra, a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha". Esta santificación no es un proceso que logramos por nuestras propias fuerzas, sino una obra que Cristo realiza en nosotros por medio de Su Espíritu Santo.

La novia de Cristo, entonces, no debe conformarse con el mundo ni mancharse con sus deseos y pasiones. Debemos vestirnos con el lino fino de la justicia, es decir, con las acciones justas que reflejan nuestra obediencia a Dios y nuestro deseo de vivir de acuerdo con Su voluntad. Estas acciones justas son fruto de una vida transformada por el poder del Espíritu y de una fe genuina que se manifiesta en amor y buenas obras.