¿Cantos De Sirena O Profetas De Lo Ilusorio?Ejemplo

2) Característica: El verdadero hombre de Dios predica y practica abnegación.

Compara esto con lo que nos dicen con sus cantos de sirena los profetas de lo ilusorio: “Ellos me han profanado entre mi pueblo por puñados de cebada y por bocados de pan… mienten a mi pueblo” (Ez. 13:19). Una traducción moderna es, “Estos profetas de lo ilusorio solo piensas en dinero y su ambición desmedida les ha vuelto mitómanos.

Este tipo de personas le da rienda suelta a su imaginación de forma desenfrenada y operan con la idea que la prosperidad durará para siempre. Edifican sobre sus sueños y planes.Su necesidad constante de dinero se convierte en el enfoque principal de su ministerio. Éllos terminan acomodando o diluyendo el evangelio para conseguirlo a su conveniencia. Entonces ellos lo contaminan todo al decir, “Dios me dijo…”.

En contraste, el mensaje de Jesucristo es dolorosamente directo – niégate a ti mismo y toma tu cruz :“Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame” (Mt. 16:24).

Negarse a sí mismo – ¡Qué concepto tan extraño por estos días frente a tantos mensajes acariciadores y cómodos! Los profetas de lo ilusorio le hacen "el quite" de frente a este llamado y compromiso por parte del Señor.

No hay ningún mérito en negarse a sí mismo. Somos salvos y estamos seguros por gracia solamente. No se debe entrar en él para ganar los beneficios de Dios. Pero negarse a sí mismo quita todo lo que impide tener una comunión constante con Cristo. Pablo dijo, “Someto mi cuerpo a mi mando (lo disciplino)… y lo pongo bajo sujeción, no sea que habiendo predicado a otros, yo mismo venga a ser desechado” (1 Cor. 9:27).

La verdad más profunda acerca de negarse a sí mismo va más allá de despojarnos de las cosas materiales. Tú puedes "Despojarte de todo", y aún no haberte negado a ti mismo.Lo que Cristo está pidiendo, es una clase de devoción hacia él mismo que eche fuera del corazón todo lo que impide una profunda comunión con Él.

No te has preguntado alguna vez: ¿Por qué los cristianos que están a punto de morir se separan tanto del mundo y de las cosas físicas y materiales? Es porque la eternidad está a la vista. Todo palidece en comparación al gozo que está por delante.

"Porque para mí el vivir es Cristo y el morir es ganancia" Decía Pablo (Filp. 1:21).