Justicia

Enfócate

Nuestro propósito y nuestro llamado de amar a Dios y a nuestro prójimo comienza con la rectitud personal, se despliega hacia la compasión y al servicio y, finalmente, se extiende buscando justicia en nuestras comunidades y sus alrededores. Al considerar lo que esto significa en tu relación con Cristo, usa este pasaje de Amós 5 y haz una oración practicando este ejercicio de respiración.

Inhala: Corra el juicio como las aguas,

Exhala: : y la justicia como impetuoso arroyo.

Escucha

Ronald Rolheiser: El anhelo santo: la búsqueda de la espiritualidad cristiana

“Las organizaciones de caridad ayudan a los que no tienen vivienda, a los heridos y a los que mueren por violencia, pero en sí mismas no pretenden llegar a la razones por las que se dan esas condiciones. La justicia intenta remontar el río y cambiar esas razones que crean la mendicidad, los heridos y las muertes violentas”.

Aplica

¿Cómo te imaginas que el mandamiento de amar a Dios y al prójimo interviene en nuestro propósito de trabajar por la justicia y la rectitud?

¿Por qué habría declarado Jesús: “Ay de ustedes, fariseos”, que guardan algunos elementos de la ley pero descuidan la necesidad de justicia?

¿Puedes imaginar tu tarea de buscar y luchar por una justicia centrada en Cristo en tu comunidad?

Responde

Termina este tiempo con la siguiente oración:

Señor Dios, guíame a amar a mi prójimo a través de actos de justicia y rectitud. Abre mis ojos y mis oídos a aquellos que están oprimidos y marginados. Libera mis manos y mis pies para servirlos y amarlos.

Que tu juicio corra como las aguas y tu rectitud como impetuoso arroyo. Amén.