Naciste Para Ser Mamá DevocionalMuestra

El soplo de aliento

Adán fue creado, pero le faltaba algo vital que necesitamos todos para vivir: aliento de vida.

Si has llegado al punto en el que sientes que el desánimo, el cansancio, la rutina y tu circunstancia te han dejado sin aliento; necesitas el aliento de Dios.

Cuando vives la maternidad anclada a la Palabra Dios estás recibiendo el soplo en tu vida, es su Palabra lo que genera vida en ti, y en los más cercanos a ti.

En distintos momentos de tu vida te enfrentarás a un esposo que necesita de ese soplo, a unos hijos que transitan una etapa complicada; el soplo de vida en tus hijos los levantará.

La hija de Jairo había muerto, pero el soplo de vida de Jesús a través de sus palabras la levantaron de la muerte. La Palabra de Dios en la vida de tus hijos produce vida.

Jesús se encontró con la mujer samaritana que hacía lo posible para simplemente seguir viviendo, ya sabes; me refiero a que ella vivía sobreviviendo.

Quizás tu tienes una amiga que este frustrada y simplemente no logre ver lo bueno de su vida; tu voz y tu compañía pueden ser el soplo de Dios en su vida.

Oración

Gracias Dios por soplar aliento de vida en mí, por soplar tu aliento en mi vientre, y veo como lo sigues haciendo día a día en mi vida.

En el nombre de Jesús. Amén.