¿Cómo Afrontar La Vida Y Sus Dificultades?Muestra

A lo largo de mi vida, he tenido la oportunidad de conocer a muchas personas muy diversas en edad, sexo, raza, nacionalidad, creencias, condición social, profesional, situación económica, etc. Lo cierto es que no existen dos personas iguales; Dios nos creó a cada uno de manera distinta. Pero he observado que todos tenemos un elemento en común: las aflicciones, los problemas. No he conocido a nadie que no haya afrontado problemas.

Por esto, estimado lector, estoy convencido de que en este momento o en muchos momentos de su vida, ha afrontado problemas y aflicciones, al igual que yo y la inmensidad de personas que existen, existirán o han existido.

Si lo anterior es una certeza, no es menos cierto el hecho de que todos los problemas y aflicciones no causan el mismo efecto en todas las personas, ni todas las personas los afrontan de la misma manera.

En mi observación, he podido apreciar que resulta decisivo el carácter de la persona para afrontar las adversidades de una forma eficaz, tranquila, en paz y hasta con cierto gozo, de manera que los problemas y adversidades no sean un obstáculo que destruya tu vida, sino más bien que te sirvan para construirla de manera firme y satisfactoria.

Definamos qué es el carácter. Existen diversas definiciones, pero destacaré una que considero amplia y precisa, y otra en sentido espiritual desde el punto de vista cristiano de la Biblia:

El carácter de una persona es un conjunto de cualidades psíquicas y afectivas que definen su naturaleza y conducta. Incluye rasgos emocionales, mentales y éticos que se manifiestan de manera consistente a lo largo del tiempo. Estas características influyen en cómo la persona piensa, siente, actúa y se relaciona con los demás. El carácter no es estático; se desarrolla y moldea a través de experiencias, decisiones e interacciones.

Existen diferentes tipos de carácter, como el Akolastos (desenfrenado e inmaduro), el Acrata (inmoderado, con conocimiento, pero sin voluntad), el Eucrata (equilibrado pero con añoranza del mal) y el Virtuoso (equilibra inteligencia, sentimientos y voluntad, deseando y haciendo lo bueno). Cada persona tiene un carácter único que afecta su emotividad y su forma de reaccionar ante las diversas situaciones.

El carácter en la Biblia se refiere a la naturaleza moral de una persona. A través de pruebas y dificultades, el carácter puede ser moldeado y fortalecido. En la vida cristiana, desarrollar un buen carácter es esencial para reflejar la imagen de Cristo y vivir de acuerdo con su voluntad. La Biblia menciona varios aspectos del carácter, como la fidelidad, humildad, amabilidad, paciencia, tolerancia, amor, perseverancia, unidad, obediencia, entre otros. Además, hay versículos específicos que describen el carácter de personas como Moisés, David y Jesucristo.

Por ejemplo, el Apóstol Pablo en Romanos 5:3-4 nos dice: "También nos alegramos al enfrentar pruebas y dificultades porque sabemos que nos ayudan a desarrollar resistencia. Y la resistencia desarrolla firmeza de carácter, y el carácter fortalece nuestra esperanza segura de salvación".

Apreciado lector, en los próximos días veremos como se describe en la Biblia el carácter de Moisés, David y Jesucristo.