O Eres Santo, O Eres ImpuroMuestra

Caminando entre dos mundos.

En nuestra vida cotidiana, nos vemos constantemente enfrentados a la separación de vivir en este mundo pero no ser parte de él. Como creyentes, somos llamados a ser luz en medio de la oscuridad, a ser sal en un mundo que muchas veces ha perdido su sabor. Esta dualidad puede resultar desafiante, ya que a menudo nos vemos tentados por las atracciones y placeres que el mundo nos ofrece, desviándonos del camino de santidad y pureza que Dios tiene para con nosotros.

El apóstol Juan nos exhorta en su carta a no amar al mundo ni las cosas que en él hay, porque aquel que ama al mundo no tiene el amor del Padre en él. Esta advertencia es un recordatorio de que nuestra fidelidad y devoción deben estar centradas en Dios, y no en las vanidades pasajeras y corruptibles de este mundo.

Caminar entre dos mundos implica tomar decisiones conscientes todos los días. Significa elegir y seguir los principios y valores del Reino de Dios por encima de las normas y tendencias del mundo. Requiere discernimiento espiritual para distinguir entre lo sagrado y lo profano, entre lo puro y lo impuro.

En medio de esta dualidad, es fundamental aferrarnos a la Palabra de Dios como nuestra brújula moral y espiritual. Es a través de la oración, la meditación en las Escrituras y la comunión con el Espíritu Santo que podemos fortalecernos para resistir las tentaciones del mundo y vivir una vida que honre a Dios en todo momento.

Que cada paso que demos en este mundo refleje nuestra identidad como hijos e hijas de Dios, comprometidos con la verdad, la justicia y el amor. Que nuestra forma de vida sea un testimonio vivo de la obra transformadora de Cristo en nosotros, mostrando al mundo la belleza y la pureza del Evangelio.

Que cada vez que las personas nos vean no piensen en lo que los demas dicen, que piensen en tus acciones, en qué haces tú para demostrar que estás caminando en lo santo y no en lo impuro.

Antes de finalizar este devocional toma 5 minutos y reflexiona sobre las áreas en tu vida donde podrías estar cediendo a las influencias del mundo en lugar de seguir los caminos de Dios. Toma la decisión hoy de apartarte de aquello que te aleja de su presencia y busca vivir una vida que refleje su santidad.

Oración: Señor, ayúdame a mantener mi enfoque en ti y a no ser arrastrado por las influencias negativas de este mundo. Que mi corazón esté lleno de tu amor y mi mente renovada por tu Palabra, para que pueda discernir entre lo santo y lo impuro. Capacítame para caminar con integridad en medio de la dualidad de este mundo, mostrando tu luz y tu gracia a todos los que me rodean.