Hacia Lo NuevoEjemplo

¿Cuánto anhelas la plenitud de lo que Dios tiene para tu vida?

Esta es una pregunta que siempre me he hecho y que me ha retado a tomar decisiones importantes en diferentes etapas de mi vida.

No quiero ser un cristiano tibio porque cuando leo las palabras de Jesús estoy muy lejos de serlo. «Toma tu cruz y sígueme», «El que pierde su vida por mi causa, la ganará», «El camino es estrecho»… y tantas otras palabras que me han llevado a decir:

«Quiero seguirte y pagar el precio, no importa cuán alto sea, porque lo que hay por delante es mucho mejor que lo que dejaré atrás. Yo quiero lo mejor, quiero caminar contigo. Procésame. Llévame más profundo. Me rindo. Más de ti y menos de mí».

Si creemos que Dios es 100% real, y que lo que su Palabra dice es verdad, no podemos vivir de otra manera que no refleje esto. No podemos elegir lo que nos conviene. No hay tiempo que perder.

Te repito la pregunta inicial:

¿Cuánto anhelas la plenitud de lo que Dios tiene para tu vida?

También te pregunto: ¿Estás dispuesto a dejar atrás lo que te impide avanzar, por muy difícil que sea, si eso significa llegar a esta plenitud?

Te animo a escribir una lista de metas para tomar un paso más en tu fe, pidiendo al Espíritu Santo que te guíe hacia sus propósitos.