Aquí Estoy, Señor: Devociones del Ministerio Tiempo de GraciaEjemplo

No me siento muy bien conmigo mismo
Señor, tú sabes que hay muchos días en que mi sonrisa y mi aparente calma son sólo una máscara; son la máscara que llevo puesta para esconder lo que en verdad está ocurriendo dentro de mi. Me gustaría sentirme más exitoso. Me gustaría no haber pasado tanto tiempo preocupándose por mi aspecto y odiando todos mis defectos. Me gustaría sentirme más confiado en mí mismo. Esta es mi culpa secreta: no me quiero mucho a mí mismo.
Tengo muchos oscuros sentimientos y estados de ánimo. Soy dolorosamente consciente de mis defectos y deficiencias. Me esfuerzo mucho por mejorar mi apariencia, pero me temo que esa es una causa perdida. Nunca pienso que yo tenga buen aspecto.
Señor, tú eres mi gran esperanza. Tú eres el que ama en gran manera a los que no merecen ser amados. Tú eres el único que tratas como amigos a los que están solos y a los perdedores; tú das belleza a cambio de cenizas. Tú me haces sentir amado y valioso. “En la multitud de mis pensamientos íntimos, tus consolaciones alegraban mi alma” (Salmo 94:19). Ayúdame a dejar de obsesionarse con mi apariencia y con lo que la gente podría pensar de mí. Lo más importante es que tú te preocupas por mí. Te doy gracias por el amor incondicional que tú tienes para mí. Si tú me perdonas, puedo perdonarme a mí mismo. Si tú me amas, puedo amarme a mí mismo. Si tú crees que soy alguien, soy alguien en verdad.
Señor, tú sabes que hay muchos días en que mi sonrisa y mi aparente calma son sólo una máscara; son la máscara que llevo puesta para esconder lo que en verdad está ocurriendo dentro de mi. Me gustaría sentirme más exitoso. Me gustaría no haber pasado tanto tiempo preocupándose por mi aspecto y odiando todos mis defectos. Me gustaría sentirme más confiado en mí mismo. Esta es mi culpa secreta: no me quiero mucho a mí mismo.
Tengo muchos oscuros sentimientos y estados de ánimo. Soy dolorosamente consciente de mis defectos y deficiencias. Me esfuerzo mucho por mejorar mi apariencia, pero me temo que esa es una causa perdida. Nunca pienso que yo tenga buen aspecto.
Señor, tú eres mi gran esperanza. Tú eres el que ama en gran manera a los que no merecen ser amados. Tú eres el único que tratas como amigos a los que están solos y a los perdedores; tú das belleza a cambio de cenizas. Tú me haces sentir amado y valioso. “En la multitud de mis pensamientos íntimos, tus consolaciones alegraban mi alma” (Salmo 94:19). Ayúdame a dejar de obsesionarse con mi apariencia y con lo que la gente podría pensar de mí. Lo más importante es que tú te preocupas por mí. Te doy gracias por el amor incondicional que tú tienes para mí. Si tú me perdonas, puedo perdonarme a mí mismo. Si tú me amas, puedo amarme a mí mismo. Si tú crees que soy alguien, soy alguien en verdad.
Escrituras
Acerca de este Plan

Dios sabe que algunas veces nuestras lenguas y nuestros cerebros no tienen las palabras para expresarle a él lo que queremos, por eso él nos dio el bello libro de los Salmos para darnos esas palabras y pensamientos que necesitamos para hablarle a él. Estas devociones, una para cada día del mes, utilizan Salmos para ayudarle a expresar al Señor sus necesidades, pesares, y alegrías.
More
Este plan fue creado por LifeChurch.tv.