¿Quién Se Esconde en Mi Armadura?Muestra

Este era un capitán romano.

Pero te sorprenderá lo que te diré a continuación... No era mala persona, de hecho era muy amado en el pueblo de Israel, a tal punto que se podía decir que de cierto modo creía en el Dios de Israel, aunque no le conocía, y no le entendía mucho.

Este capitán se parece a muchos. Hacen las cosas bien, no tienen ninguna enfermedad, viven en buenas condiciones, y tienen un gran corazón. Ese corazón era realmente hermoso, tanto que se preocupó por uno de sus siervos cuando enfermó.

Lo cierto es que al saber que Jesús sanaba, se dio cuenta de que Jesús no solo era un hombre común entre las personas, no era como uno de los líderes religiosos, y no se parecía en nada a los líderes políticos de su época.

¿Quién era Jesús? Se preguntaba este capitán.

Pero algo que podía quedar claro era que no se sentía digno de que Jesús entrara a su casa, y se acercara a él.

No sabemos por qué no se sentía digno, la Biblia no lo registra. Solo lo dice.

Es extraño... los líderes religiosos decían: "Él es digno de que entres en su casa"... Pero el decía: "No soy digno de que entres bajo mi techo".

Sea como sea, estas palabras siguen siendo oídas ante Jesús.

No es que seas mala persona, es solo que no sabes si alguien tan grande podría oírte a ti, prefieres que algún líder religioso vaya e interceda por ti.

"Es que yo sé que a ti Dios te oye", podemos escuchar de algunos capitanes de hoy en día, a los que Dios también quiere escuchar.

No sé qué esconde tu armadura, pero la Biblia dice que podemos entrar confiadamente al trono de su gracia, y que Dios está dispuesto a escucharte.

"No nací en un hogar cristiano".

"No he sido cristiano lo suficiente".

"Apenas y sé orar".

El soldado romano también pudo haber dicho todo esto: "No nací en la nación de Israel, no soy un religioso, y no practico todas las tradiciones religiosas". Pero el soldado vio más allá y dijo: "Yo sé que tú eres hombre de autoridad". Él dijo: "No se trata de quién soy yo, sino de quién eres tú".

Dios es bueno, Dios ama, Dios ve más allá de nuestra armadura, Dios quiere revelarse a nosotros.

Cuando Dios escucha a este hombre, dice: "Os digo que ni aun en Israel he hallado tanta fe".

Te sorprenderás de lo que Dios podría decirte si te acercas a él, y quitas esa armadura que tienes.