Un Par de Ojos DiferentesMuestra

Dia 1: Ojos espirituales

Tengan paciencia conmigo mientras les doy algunos pasajes de las Escrituras para construir mi argumento. Al observar las circunstancias actuales en nuestro país y la desesperación que muchos sienten con respecto a hacia dónde se dirige, creo que debemos hacernos la pregunta: "¿Qué está haciendo Dios?" Creo que a la mayoría de nosotros nos gustaría tener una idea de hacia dónde se dirigen nuestras vidas y el futuro de este país. Busquemos la perspicacia de Dios:

'Cuando el siervo del hombre de Dios se levantó y salió de madrugada a la mañana siguiente, un ejército con caballos y carros había rodeado la ciudad. "Oh, mi señor, ¿qué haremos?", preguntó el sirviente. "No tengas miedo", respondió el profeta. "Los que están con nosotros son más que los que están con ellos". Y Eliseo oró, diciendo: Oh Jehová, abre sus ojos para que vea. Entonces el Señor abrió los ojos del siervo, y él miró, y vio los montes llenos de caballos y carros de fuego alrededor de Eliseo.' (2 Reyes 6:15-17)

"Ruego también que los ojos de su corazón sean iluminados, para que conozcan la esperanza a la que los ha llamado, las riquezas de su gloriosa herencia en los santos, y su incomparable poder para con nosotros los que creemos..." (Efesios 1:18-19)

Hay un tema consistente en los dos pasajes anteriores. Es la verdad de lo que está obrando invisiblemente tras bambalinas y que los hijos de Dios tengan los ojos abiertos para verlo. En el caso del siervo de Eliseo, debía tener un nuevo par de ojos espirituales para que sus ojos físicos pudieran ver su protección y la victoria que se avecinaba. En el pasaje de Efesios, es la necesidad de tener "los ojos de nuestro corazón" abiertos. Concentrémonos en los ojos del corazón, porque Pablo dijo que dará a todos los creyentes una gran esperanza, si somos capaces de usar este par de ojos. Entonces, ¿qué es el ojo del corazón? Para ir por ese camino y responder a esta pregunta, debemos mirar otro pasaje que trata de "ver lo invisible". Sígueme aparte:

"AHORA BIEN, LA FE es la certeza (la confirmación, el título de propiedad) de las cosas que esperamos, siendo la prueba de las cosas que no vemos y la convicción de su realidad [la fe que percibe como un hecho real lo que no se revela a los sentidos]." (Hebreos 11:1 Biblia Amplificada)

¿Cómo te habla este pasaje? Esto es lo que me dice: "Lo que espero está oculto a mi vista, pero está ahí listo para ser abrazado. Es algo que Dios quiere darme". Entonces, esta es mi pregunta... ¿Qué esperas? ¿Quieres lo que Dios quiere darte o solo quieres lo que crees que necesitas? Política y culturalmente hablando, ¿qué espera la Iglesia en este país? La forma en que se responda a esto puede abrir algunos ojos ciegos, porque puedo decirles que si nuestra esperanza es vivir en un país donde no hay desafíos a nuestra fe y valores, entonces no estamos trabajando en unión con el Espíritu Santo. Él no está interesado en nuestra comodidad, sino más bien en Su propósito y nuestra parte en él. Si nuestra esperanza es nuestra comodidad, no estamos viendo el campo de batalla en el que Dios nos ha dejado. No estamos viendo una cultura desalentada y en rápido deterioro que necesita desesperadamente la liberación que podemos traer. Si tenemos miedo de perder nuestras propias rutinas cómodas debido a los desafíos a nuestra libertad religiosa, no estamos viendo las grandes oportunidades para dispensar la esperanza que Cristo da. Debemos empezar a ver con los ojos de nuestro corazón a dónde se ha ido este mundo, y cómo esto nos prepara para una gran campaña. Las amenazas son malas, pero no tanto como se podría pensar. Solo tenemos que tener la perspectiva correcta.

Me acuerdo de la Compañía E de la 101ª División Aerotransportada en la Segunda Guerra Mundial, cuando recibieron un mensaje del general McAuliffe de que los alemanes los habían rodeado y los alemanes les pidieron que se rindieran. La respuesta de la Compañía E fue: "¡Y qué! Somos paracaidistas. Siempre estamos rodeados por el enemigo. Sí, ¿nos tienen rodeados? ¡¡Pero, rodearon el equipo equivocado!!"

Muchos de nosotros estamos desanimados y no sabemos cómo involucrarnos en un mundo que se está volviendo hostil a nuestras creencias y prácticas. Sería muy fácil correr a un lugar de aislamiento del mundo y esperar el regreso de Jesús. Pero no te unas a esa creencia. Este es el tiempo para el que hemos sido levantados. Claro que ahora estamos rodeados de más personas que no piensan como nosotros, que no oran como nosotros, que no tienen los valores cristianos que nosotros tenemos, y que no buscan seguir la voz de Cristo como nosotros. Pero recuerden, ellos sirven a un dios falso y nosotros servimos al Único Dios. Nuestro Dios prevalecerá. Él lo ha prometido.

Al igual que el siervo de Eliseo que necesitaba que Dios le abriera los ojos para ver el poderoso ejército de Dios que rodeaba a su enemigo, así es contigo y conmigo. Necesitamos recordar las palabras de Jesús de que en este mundo tendremos tribulación, pero Él ha vencido al mundo. Oremos para que los ojos de nuestro corazón se abran y miremos al enemigo que nos rodea como víctimas a punto de encontrarse cara a cara con Dios Todopoderoso y algunos de Sus valientes hombres llamados Influencers. Es difícil temer a un enemigo cuando sabemos que está a punto de convertirse en una víctima porque su fin no está lejos.