Toque físico - "Un lenguaje de Amor"Muestra

La falta de contacto físico daña nuestra salud, existe actualmente un fenómeno neurológico conocido como hambre de tacto, justo por la ausencia de contacto como abrazos, besos y caricias a causa del miedo de contraer alguna enfermedad. Esta falta de cercanía debilita el sistema inmunológico, influye en la presión sanguínea, el ritmo cardíaco y los niveles de hormonas del estrés.

Las personas no pueden sobrevivir y desarrollarse sin contacto físico, una caricia en la espalda, los apretones de manos, los abrazos, el hombro con hombro, los besos al llegar y al despedirse (incluso ahora nos tocamos los puños a raíz de la pandemia) e inventamos cualquier forma en la cual podamos tener ese toque tan necesario.

En los años 50-60 en EE. UU., el Dr. Harry Harlow, psicólogo, llevó a cabo una serie de importantes experimentos famosos con crías de monos, para estudiar el vínculo emocional que se crea entre un bebé y sus cuidadores, construyeron dos tipos de «madres», unas hechas de alambres con un biberón del que tomaban leche, y otras que simplemente estaban recubiertas de felpa (sin biberón). El resultado mostró cómo las crías preferían al muñeco, a pesar de que este no les proporcionaba alimento alguno.

El toque físico es vital para el ser humano, en el matrimonio, en los hijos, en la familia, con nuestros amigos, es un sentir totalmente necesario a fin de no dar cabida al enemigo a que tome ventaja, ¿te imaginas un matrimonio sin intimidad, un trato con los padres e hijos sin besos, una amistad sin abrazos?

Toma en cuenta los siguiente:

Tocar transmite un mensaje poderoso. Un simple toque amoroso es más que una caricia.

El contacto, en el momento y lugar apropiados, transmite diversos significados, considera siempre el efecto que tendrá ese toque.

Reconoce la necesidad del toque físico en tu vida, las circunstancias actuales comienzan a entrenar al ser humano para evitar el contacto físico, Dios ha creado esta forma de transmitir afecto por las razones adecuadas, confía en Él.

Continúa nutriendo tus relaciones afectivas a través del tacto, brinda un abrazo afectuoso a tus seres queridos, no te pierdas sentir la mano de tu pequeño hijo(a), sobrino(a) sobre tu mejilla, considera tocar la espalda de alguien a quien aprecias mostrando afecto y aceptación, asegúrate de tener contacto visual con las personas que te rodean y sobre todo muestra el amor de Dios a través de cada uno de los actos en tu vida diaria.

Oremos. - Padre muchas gracias por crear diversas formas para transmitir amor los unos a los otros. Estamos seguros de que Tú has tenido en tu corazón ese sentir para que podamos sentir afecto de nuestros seres queridos, gracias porque solo Tú pudiste establecer algo tan hermoso y maravilloso como es el amor. Te pido que me enseñes a conducirme en cada momento según las circunstancias y que pueda comprender que Tú me amas por sobre todas las cosas, Tú eres nuestro amado. En el nombre de Jesús, amén.