20 de febrero

Introducción

Juan 8:1–11: Los líderes religiosos llevan a Jesús a una mujer sorprendida en adulterio y buscan ponerlo a prueba al pedir su juicio sobre el asunto. Una vez más, Jesús los desconcierta con su respuesta.

Versículo clave para hoy: Juan 8:2b

La gente se le acercó, y él [Jesús] se sentó y comenzó a enseñarles.

Reflexiona

La Ley de Moisés requería dos testigos en casos como esta acusación de adulterio (Deuteronomio 17:6; 19:15), y también que tanto el adúltero como la adúltera fueran condenados a muerte (Levítico 20:10; Deuteronomio 22:22). Los fariseos estaban violando así los requisitos legales al no presentar testigos y no traer al adúltero. ¿Cuál es tu reacción ante la forma en que Jesús manejó el asunto? ¿Qué le dijo a la mujer? ¿Qué te enseña la lectura de hoy acerca de Jesús?

Ora

Señor Jesús, me presento ante ti hoy con un corazón arrepentido, buscando perdón. Gracias por tu amor y misericordia, y por la oportunidad de vivir una nueva vida en ti. Amén.

Lectura para mañana

Juan 8:12–30: Los oponentes de Jesús continúan desafiándolo.