La Libertad Del Porno Empieza AquíMuestra

¡Ha salido todo mal!

Por mucho que dijiste que no lo harías, lo hiciste nuevamente. Todos hemos pasado por eso. Cuando pecamos, la tendencia es negar, minimizar y racionalizar. Pero eso no nos lleva a ninguna parte.

"Quien encubre su pecado jamás prospera; quien lo confiesa y lo deja halla perdón" (Proverbios 28:13). (Proverbios 28:13).

Ocultar nuestro pecado nos impide prosperar. Nos mantiene estancados. Con la confesión y el arrepentimiento obtenemos la misericordia de Dios.

"Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad" (1 Juan 1:9).

Para aproximadamente el 95% de las personas, se necesitan de 6 meses a 2 años para experimentar la libertad de una adicción a la pornografía o al sexo. Se necesita tiempo para establecer nuevos hábitos saludables en torno a la pureza sexual. Alguien puede dejar su comportamiento sexual no deseado antes de eso, pero establecer un estilo de vida de libertad lleva tiempo. La cantidad de tiempo depende de la situación individual de cada persona y de su compromiso con la recuperación.

Las recaídas, especialmente al principio del proceso, ocurren. Has entrenado tu cerebro en un hábito durante años y ahora quieres empezar uno nuevo. Esto lleva tiempo. Esto no lo hace menos pecaminoso o serio, pero deberías perdonarte a ti mismo y recibir el perdón de Dios en Cristo Jesús.

Es importante utilizar una recaída como una oportunidad para crecer. Cuando lo hagas, podrás fracasar, pero seguir hacia adelante.

¿En qué sentido es una oportunidad?

Es una oportunidad para decírselo a alguien. Como vimos, Santiago 5:16 nos dice que la curación comienza confesándose unos a otros. Es difícil hablar de nuestros pecados y recaídas, especialmente cuando acaban de ocurrir, ¡pero vale mucho la pena! ¿Tienes un amigo o mentor al que puedas confesarse? Si no es así, ora por uno.

Es una oportunidad para evaluar lo ocurrido. Una persona no deja la pornografía y crea hábitos saludables adquiriendo mágicamente más fuerza de voluntad. Debes crecer en una serie de áreas, y una de ellas es la autoconciencia: entender tus desencadenantes y qué es lo que te lleva a actuar.

He aquí algunas preguntas para hacer sobre tu última recaída:

• ¿Qué fue lo que inicialmente convirtió mis pensamientos en necesidades sexuales?
• ¿Qué fue lo que me provocó?
• ¿Qué dispositivo usé para recaer?
• ¿Qué ajustes puedo hacer para evitar que esto vuelva a suceder? ¿Dejar de usar un dispositivo? ¿Evitar los desencadenantes sexuales?
• ¿Qué haría diferente si me encontrara en una situación similar en el futuro?
• El arrepentimiento implica apartarse de nuestro pecado. ¿Cómo puedes alejarte de este pecado? ¿Cuáles son esos factores desencadenantes que necesitas eliminar de tu vida?

Parte del arrepentimiento implica recibir la gracia de Dios y creer lo que dice su Palabra en lugar de sus sentimientos.

" Por lo tanto, ya no hay ninguna condenación para los que están unidos a Cristo Jesús" (Romanos 8:1)

Si has recibido a Cristo como tu Salvador y Señor, estás perdonado ante Dios, no condenado. No te debes condenar a ti mismo con un discurso negativo. Recibe lo que Dios dice de ti por fe y sigue adelante.

Proverbios 24:16 dice: "Porque siete veces podrá caer el justo, pero otras tantas se levantarán; los malvados, en cambio, se hundirán en la desgracia”.