Limpios De CorazónMuestra

LA IMPORTANCIA DE TENER UN CORAZON LIMPIO

Dios siempre ha estado interesado en nuestro corazón (Emociones, pensamientos, motivaciones) porque quiere purificarlas, ya que según nuestro corazón se determina el tipo de persona que somos.

La sugerencia del Señor de guardar y cuidar nuestro corazón por sobre todas las cosas es porque el problema no está en las cosas malas que hago, no está en que yo mienta, en que yo robe, en que yo mire pornografía, en que yo adultere, en que yo tenga problemas con el diezmo. Estas cosas son solo el efecto de algo que se gestó en el corazón.

Es por eso que Jesús dijo que el que codiciaba la mujer de su prójimo en sus pensamientos, ya estaba adulterando.

Ante ese panorama tenemos solo dos opciones: O tenemos un corazón limpio o tenemos un corazón sucio, pues acá no hay términos medios.

La importancia de un corazón limpio fue lo que marcó la diferencia entre Daniel y David.

Daniel:

"Y Daniel propuso en su corazón no contaminarse con la porción de la comida del rey, ni con el vino que él bebía; pidió, por tanto, al jefe de los eunucos que no se le obligase a contaminarse" (Daniel 1:8).

Es en este versículo donde podemos entender mucho del desenlace que tuvo Daniel. Él tomo una decisión radical, y lo propuso desde su corazón, es decir, desde sus emociones, pensamiento y motivaciones. Y vemos que a pesar de las dificultades que presento, Daniel prosperó en todo y Dios siempre le guardó.

David:

"Aconteció al año siguiente, en el tiempo que salen los reyes a la guerra, que David envió a Joab, y con él a sus siervos y a todo Israel, y destruyeron a los amonitas, y sitiaron a Rabá; pero David se quedó en Jerusalén. Y sucedió un día, al caer la tarde, que se levantó David de su lecho y se paseaba sobre el terrado de la casa real; y vio desde el terrado a una mujer que se estaba bañando, la cual era muy hermosa" (2 Samuel 11:1-2).

David, según su motivación, decidió estar en el lugar incorrecto, pues él debía estar en la guerra. Y a causa de esto fue que paseando por su terraza, comenzó a codiciar a Betzabé y bueno, la historia tú ya la conoces.

David, determinó malas cosas previo a esto, es decir, el pecado no solo fue cuando adulteró con Betzabé, sino que comenzó a gestarse en el corazón, con deseos y motivaciones incorrectas.

Nuestra vida se van a reflejar con alguno de estos dos cosas. ¿Cómo quién estás decidiendo tú? ¿Cómo David o como Daniel?

Lo que pensamos en el corazón, lo que deseamos en el corazón y la motivación que hay en nuestro corazón, pues esto determinará el tipo de persona que somos. Lo que pienso, es lo que soy y lo que soy determina lo que hago.