El Perdón Abre Los CielosMuestra

TIPOS DE PERDÓN.

1- Perdonar a Dios.

Nunca imaginaste que deberías perdonar a Dios. Siempre le pedimos perdón a Él, pero éste perdón lo necesitan muchas personas.

Es el perdón por aquellas cosas duras que nos ha tocado atravesar en las que le hemos echado la culpa a Dios.

“Dios no me cuidó”. “Dios se olvidó de mí”. “Dios se llevó a mi papá, mamá y estoy solo/a”.

Esto no refiere a una ausencia de Dios en nuestras vidas, sino a que le hayamos atribuido a Dios lo feo y difícil que nos deparó la vida. Dios siempre tiene la actitud de perdonarnos, pero debe soltarse perdón de nosotros hacia Él.

2- Perdonarnos nosotros.

No cargar nuestro corazón con actitudes erróneas, culpas del ayer o por cosas que ya sería imposible revertir.

La culpa es enemiga del perdón. La culpa es como una condena interior que te dice constantemente:

“Te lo mereces”. “Nadie te va a creer”. “Lo hiciste a propósito". “Vas a fallar otra vez”. Y, todas esas frases acusadoras son barreras que impiden soltar perdón.

Judas tenia destino de salvación, pero las barreras de la culpa y auto castigo fueron más fuertes y él por no perdonarse, ¡Se autodestruyó!

No perdonarse, no ayuda a nadie.

El perdonarme hace que pueda reconocer que no es por mí, ¡sino para mí!

Un instante con Jesús hace que te perdones para siempre, porque su palabra es sanadora.

El perdón nos hace madurar, pues nadie quiere perdonarse muchas veces por lo mismo… pero al hacerlo, uno aprende del error y eso es madurar.

“Por tanto, si traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda” (Mateo 5:23-24).

Madurar es salir de mi comodidad o de mi status, y bajar para reconciliarme si alguien se siente herido por mi actitud.