Nuevo en la Fe: Plan de Lectura de la BibliaMuestra

Nueva familia

Los primeros cristianos se llamaban unos a otros como hermanos y hermanas, aunque no estuvieran emparentados y a menudo eran provenientes de diversas culturas. Los otros podrían haber pensado, ¿qué hace que ellos, los seguidores de Cristo se unan como una familia? La respuesta es: ¡su fe en Cristo!

De acuerdo a los autores bíblicos, esta comunidad no era solamente una familia simbólica sino una sola familia en Dios. Ellos enseñaban que, a través de la fe en Jesús, ya no estamos separados de Dios, porque hemos sido adoptados como sus hijos. Si estoy en Cristo en conjunto con los demás seguidores, somos uno en Cristo. Juntos pertenecemos a Cristo como a una comunidad diversa que se ha entregado a Él. Lo que nos une espiritualmente es un amor desinteresado y un interés por las necesidades de los demás. El Nuevo Testamento desarrolla la complejidad de la metáfora de la familia, pero brinda la esencia de lo que es pertenecer a la familia. Tú perteneces a la familia de Dios.

Además de ser parte de una comunidad, pertenecer a la familia de Dios significa que Dios es tu Padre Celestial. A lo largo de la Biblia aparece la palabra “Padre”, la cual Dios usa para describirse a sí mismo y para describir el tipo de relación que anhela tener con nosotros. Él quiere que confiemos en Él como un Padre comprometido que nos provee y nos ama incondicionalmente.

Es comprensible que haya una resistencia para relacionarse en la familia de Dios, ya que puede que, para algunos, pensar en la familia y en nuestros padres, genere sentimientos de desilusión, traición, y daño. La respuesta de la Biblia no es huir de la familia sino descubrir que perteneces a una nueva familia formada por personas quebrantadas que han encontrado el perdón en Cristo. Leamos algunos versículos de la Biblia que hablan acerca de la familia de Dios.

REFLEXIONA

A medida que piensas acerca de ser parte de una familia en una iglesia local: ¿Qué esperas recibir de esta comunidad, y qué esperas dar?