Vamos a Hablar De Honor Y De Respeto MutuoEjemplo

Piensa en las personas con las que te relacionas cada día: familia, amigos, compañeros de clase, compañeros de equipo y demás. Ya sea en persona o en línea, la forma en que nos tratamos es importante. Cómo nos hablamos, cómo interactuamos, cómo respondemos, todo es importante. No sólo porque queramos ser buenos seres humanos, sino porque, como seguidores de Dios, influye en la forma en que la gente lo percibe en nosotros. Amar a Dios debería cambiar todos y cada uno de nuestros rasgos personales, incluido el modo en que tratamos a los demás. ¡Nuestras acciones deben ser un reflejo de ese amor!

Esta semana, habla con un amigo de confianza, mentor o líder de grupo pequeño que sea realmente bueno mostrando el amor de Dios a los demás. ¡Pídele consejo sobre cómo puedes hacer lo mismo por otras personas esta semana!