Transparencia - Andar en luz

El proceso de sanidad y liberación comienza con la disposición de RECONOCER que algo está mal y el coraje de EXPONERLO a la luz.

1 Juan 1:7 (NBLA)

Pero si andamos en la LUZ, como Él está en la Luz, tenemos COMUNIÓN los unos con los otros, y la SANGRE de Jesús Su Hijo nos limpia de todo pecado.

Esta Escritura contiene tres elementos que deben abrazarse juntos para recibir el beneficio total de la LIMPIEZA que solo la SANGRE DE JESÚS puede traer.

Para caminar en la luz, debemos:

1. Reconocer el pecado: percibir, ver, admitir.
2. Deja de ocultar la iniquidad: dejar de ocultar/encubrir la perversidad.
3. Confiesa la transgresión: confiesa y renuncia (desecha el pecado).

Salmo 32:1-2 (NBLA)

¡Cuán bienaventurado es aquel cuya transgresión es perdonada, cuyo pecado es cubierto! ¡Cuán bienaventurado es el hombre a quien el SEÑOR no culpa de iniquidad, y en cuyo espíritu no hay engaño.

• Transgresión = rebelión, romper con la autoridad.
• Engaño = hacer que alguien acepte como verdadero o válido lo que es falso, para engañar.

Salmo 32:3 (NBLA)

Mientras callé mi pecado, mi cuerpo se consumió con mi gemir durante todo el día..

Salmo 32:5 (NBLA)

Te manifesté mi pecado, y no encubrí mi iniquidad. Dije: «Confesaré mis transgresiones al SEÑOR» y Tú perdonaste la culpa de mi pecado.

La transparencia (sin engaño) se logra RECONOCIENDO el pecado, al tomar la decisión de dejar de ocultar las transgresiones. ¡Eso es caminar en la luz!

• Caminar en la luz es dejar de ocultar nuestro quebranto y reconocer nuestro pecado.
• Caminar en la luz es la decisión deliberada de exponer nuestra condición.
• Caminar en la luz crea la oportunidad de una verdadera comunión.

Cuando estamos dispuestos a ser observados, la mirada de Dios y de los demás cambia el estado de nuestra conciencia.

2 Crónicas 16:9 (NBLA)

Porque los ojos del SEÑOR recorren toda la tierra para fortalecer a aquellos cuyo corazón es completamente Suyo...