Proyecto Biblia | El Reino al revés / Parte 2 - HechosMuestra

Lucas nos cuenta cómo reiteradamente Pablo es golpeado, encarcelado y hasta arrastrado fuera de las ciudades por proclamar que Jesús es el Rey mesiánico de los judíos y de todo el mundo. Cuando Pablo llega a Corinto, espera que lo persigan de nuevo. Pero Jesús consuela a Pablo y se le aparece de noche en una visión y le dice, “no te asustes, continúa hablando y no te quedes callado. Yo estoy contigo. Nadie te atacará ni lastimará porque Yo tengo muchos en esta ciudad”. Y ciertamente, Pablo puede quedarse en la ciudad por un año y medio para enseñar las Escrituras y hablar sobre Jesús. Y aunque hay personas que intentan atacar a Pablo, justo como Jesús dijo, no tienen éxito. De hecho, el líder que intentó lastimar a Pablo, por el contrario, fue víctima de ataques. Pablo no fue echado de Corinto, pero cuando llegó el momento se mudó de la ciudad con amigos nuevos para reconfortar a los discípulos que vivían en Cesarea, Antioquía, Gálatas, Frigia y Éfeso.

En Éfeso, Pablo da a conocer el don del Espíritu Santo a los nuevos seguidores de Jesús y enseña durante un par de años, extendiendo las buenas nuevas sobre Jesús a todos los que viven en Asia. El ministerio prospera porque milagrosamente muchas personas sanaron y fueron liberadas, la economía de la ciudad empieza a cambiar debido a que las personas se alejan de lo oculto y abandonan sus ídolos para seguir a Jesús. Los comerciantes locales que obtenían ganancias de la idolatría estaban molestos y comenzaron a provocar a las multitudes para que defendieran a sus dioses y pelearan contra los compañeros de viaje de Pablo. La ciudad entra en caos y la rebelión continúa hasta que un escribano del pueblo habla.

Lee, reflexiona y responde:

• Compara las palabras de Jesús a Pablo en Hechos 18:9-10 con las palabras de Jesús en Mateo 28:19-20. ¿Qué notas? Lee también las palabras de Dios a Israel por medio de su profeta en Isaías 41:10. ¿Qué observas? ¿Cómo te animan o desafían las palabras de Jesús hoy?

• Al considerar las palabras de Jesús a Pablo en los versículos 9-10, ¿qué crees que significa que Jesús tenga mucha gente en una ciudad? ¿Eres uno de los miembros del pueblo de Jesús en tu ciudad?

• Los romanos creían que los dioses podían mantener su ciudad segura y próspera, así que adoraban a muchos ídolos. Un ídolo puede ser cualquier cosa en la que alguien confíe, diferente a Jesús, para obtener seguridad o consuelo. ¿Cuáles son algunos de los ídolos que hay en tu ciudad? Si muchas personas de tu ciudad se alejaran de esas cosas para adorar a Jesús, ¿cómo afectaría eso a la economía?

• Convierte tus reflexiones en una oración. Exprésale tu gratitud a Jesús. Dile dónde necesitas seguridad y cómo quieres que su poderoso mensaje renueve tu ciudad. Pídele valor para que puedas unirte a sus planes hoy.