Viviendo la cultura del ReinoMuestra

DESARROLLAR AMBIENTES CORRECTOS

a. Hay ambientes que potencian mi intimidad con Dios y son claves para mantenerme

Debemos buscar y crear ambientes que potencien nuestra intimidad con Dios.

Estos pueden incluir momentos de oración, estudio de la Palabra, adoración y comunión con otros creyentes.

Al establecer espacios y tiempos dedicados a cultivar nuestra relación personal con Dios, fortalecemos nuestra conexión espiritual y nos abrimos a recibir su guía y dirección.

RETO: Identifica aquellas actividades que potencian tu intimidad con Dios. Si no te es fácil encontrarlas, te desafío a apartar 10 minutos de tu día para dedicarte a orar, leer la Palabra, adorarle; y poco a poco verás el crecimiento en tu relación con Dios.

b. Aprender a moverte en ambientes

Esto implica estar atentos a las oportunidades y recursos disponibles para nutrir nuestra fe y crecimiento espiritual.

Podemos participar en grupos de estudio bíblico, asistir a conferencias o eventos inspiradores, buscar mentores espirituales y aprovechar los medios y plataformas disponibles para acceder a enseñanzas y recursos relevantes.

Al ser proactivos y conscientes de las opciones disponibles, podemos aprovechar al máximo los ambientes que nos rodean y obtener un mayor crecimiento en nuestra vida espiritual.

RETO: Busca personas del grupo A, B y C (te invito a repasar el primer día del Plan para identificar a qué grupo me refiero) con quienes puedas crear una comunidad para estudiar la Palabra o asistir a eventos donde el punto central sea crecer espiritualmente.

c. Debemos construir ambientes donde seamos activados

Buscar y participar en comunidades y contextos que nos desafíen y nos den la oportunidad de desplegar nuestros dones y talentos para servir a Dios y a los demás.

Al conectarnos con personas que comparten nuestra visión y nos animan a vivir en el propósito de Dios, podemos crear un entorno en el cual seamos desafiados y apoyados para crecer y desarrollarnos plenamente.

RETO: Conectarte con otras personas que buscan crecer en comunión hacia el propósito de desarrollar un estilo de vida cimentado en una Cultura del Reino es clave para ser activados en nuestros llamados o ministerios.

RESUMEN: Al buscar espacios que fomenten nuestra intimidad con Dios, aprender a aprovechar los recursos y oportunidades disponibles en esos ambientes, y ser proactivos en la construcción de comunidades que nos impulsen en nuestro propósito y llamado, estaremos creando un entorno propicio para el crecimiento espiritual, la activación en el propósito y la construcción de una cultura que refleje los valores y principios del Reino de los Cielos.