No Has Sido Creada Para Estar SolaMuestra

A Todas las Naciones

Lectura: Mateo 28:16–20

EOAO: Mateo 28:19–20

“Jesús se acercó y les dijo:
—Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. 19 Por tanto, id y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, y enseñadles a guardar todas las cosas que os he mandado. Sabed que yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.”

En el Texto

Los discípulos habían estado en la montaña rusa de sus vidas. Habían estado caminando y hablando con Jesús, viéndole hacer milagros y disfrutando de una comunión íntima. Cristo los había llamado de entre la multitud y les había dado un asiento en primera fila para presenciar su gloria. Después de la muerte de Jesús, su esperanza se desvaneció. Cuando regresó, la comunión, los milagros y la alegría volvieron por un tiempo, hasta que Jesús estuvo listo para ascender al cielo.

Terminamos nuestro estudio sobre la comunidad bíblica con el recordatorio de la Gran Comisión: "Id, pues, y haced discípulos a todas las gentes, bautizándolas en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, y enseñándoles a obedecer todo lo que yo os he mandado. Y recordad que yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo".

Dios nos amó tanto que envió a su Hijo único, Jesús, a morir por nuestros pecados para que pudiéramos estar con Él para siempre. Debido a ese gran amor, podemos estar en comunión con Dios. Dios estuvo con los israelitas en el Antiguo Testamento mientras allanaba el camino hacia la tierra prometida, y sigue yendo delante de nosotros ahora. Dios cumple sus promesas. Nunca nos ha abandonado, y Jesús promete que también está con nosotros, siempre. Cuando miró a la gente que tenía delante, algunos que adoraban y otros que dudaban, les dejó un mandato y un consuelo:

Debían proclamar el Evangelio al mundo que le había rechazado, y no olvidar nunca que Jesús estaría siempre con ellos.

Ahora nos toca a nosotros tomar esa Buena Noticia y compartirla con todas las naciones. En cada situación, en cada comunidad y en cada nación, Jesús está con nosotros.