¡Tengo Prisa! Muestra

¡DE INMEDIATO!

En un mundo inmediato como el que nos ha tocado experimentar, es difícil poder mantenernos quietos.

Pensemos en esto, cuando inicio la pandemia por COVID-19, y muchos tuvimos que quedarnos en casa, quisimos aprovechar el tiempo haciendo cosas que antes no podíamos. Luego de un tiempo, anhelábamos que todo volviera a la normalidad, trabajos, escuelas, conciertos, cine; ya que no estamos acostumbrados a simplemente esperar.

Incluso podemos observar que somos una sociedad de lo inmediato, cuando tenemos aplicaciones móviles con videos de solo un minuto, cuando estamos a la espera de una nueva temporada de esa serie que nos gusta, y la devoramos en un día de maratón, cuando nos desesperamos si nuestro WIFI va un 5% más lento de lo normal, cuando cada vez hay más restaurantes de comida “rápida".

Es cierto, con la tecnología mucho de lo inmediato es bueno, pero cuando se trata de nuestra vida, Dios anhela más que satisfacción inmediata. Por ello, aunque para nosotros represente un gran sacrificio la espera, Dios es el que provee la paciencia y mesura mientras esperamos, mientras damos un paso a la vez, mientras prepara nuestro corazón para que lo que Él plante eche raíces fuertes y prevalezca.

Dios tiene un plan para tu vida. Recuerda una vez más, Dios no llega tarde, pero tampoco te dará de inmediato algo por lo que Él quiere prepararte.

Dios no nos pone en una sala de espera silenciosa y aburrida, Él está con nosotros aprovechando ese tiempo para que cultivemos nuestra relación con Jesús, para que otros puedan ver Su paz en nuestras vidas, Su paciencia, Su tranquilidad y finalmente Su gran milagro como recompensa de la espera.

Él no se ha olvidado de Sus promesas para tu vida, solo espera con paciencia.