Proyecto Biblia | Semana Santa y PascuaMuestra
Día 3: Martes santo
Para el martes, la falta de voluntad de Jesús de obedecer a la élite religiosa lo había convertido en un enemigo de los líderes de Israel. Ellos desafían a Jesús con sus suposiciones y tradiciones doctrinales, con la esperanza de demostrar públicamente que Jesús es un fraude: un criminal y un mentiroso que está decidido a desestabilizar su control. Pero Jesús sigue diciendo la verdad, mostrando a los líderes que el error es de ellos. ¡Qué ironía! Están enojados con Dios porque según ellos, Dios no era suficientemente piadoso (ver Mateo 21:23-27; Marcos 11:27-33; Lucas 20:1-8).
Jesús predice que los ejércitos romanos un día rodearán a Jerusalén y destruirán la ciudad y su templo, pero sus discípulos se esfuerzan por comprender esto y le preguntan cuando va a suceder.
En un discurso, llamado a veces el Discurso de los Olivos, Jesús da algunas imágenes vagas de lo que está por venir. Él predice su muerte, pero también asegura a los discípulos que su muerte no será el final. Dice que resucitará y seguirá viviendo después de la muerte, antes de finalmente regresar a establecer plenamente su Reino en la Tierra. Jesús advierte a los discípulos del peligro de confiar en personas que dicen que conocen los signos de los tiempos finales. Esas llamadas "señales" (como desastres naturales, guerras y rumores de conflicto) son partes normales del mundo que se está renovando. En lugar de perder el foco al quedar envuelto en ese temor, Jesús insta a sus seguidores a que se mantengan enfocados en él y sigan su camino amoroso. Sigan viviendo en el Reino de Dios, les dice, y no dejen de difundir las buenas noticias de Jesús a todas las personas.
En el video de hoy, nos sumergiremos más en los temas clave del Discurso de los Olivos al seguirle el rastro al concepto bíblico del Día del Señor, un día en el que Dios ejecutará su juicio contra el mal y permitirá que una nueva creación florezca, en última instancia, gracias a la muerte y resurrección de Jesús.
Oración por el Martes santo: Oh Señor Dios nuestro, cuyo bendito Hijo dio la espalda para ser azotado y no ocultó su rostro ante la vergüenza y los escupitajos: Danos gracia para aceptar con alegría los sufrimientos del tiempo presente, confiados en la gloria que ha de manifestarse; por Jesucristo nuestro Señor, que vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un solo Dios, por los siglos de los siglos. Amén
Acerca de este Plan
Proyecto Biblia diseñó este plan para ayudar a personas, familias y grupos a reflexionar sobre los últimos días de Jesús y celebrar su resurrección. Este plan de ocho días incluye videos animados, resúmenes y oraciones diarias para guiarte a través de la entrada triunfal de Jesús, la confrontación con los líderes de Israel, la muerte sacrificial y la resurrección victoriosa.
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Queremos dar las gracias a Proyecto Biblia por facilitarnos este plan. Para más información, visita: www.proyectobiblia.com