Up: Escala Tu Fe a Otro NivelMuestra

Conquistar la cima de una montaña es una experiencia alucinante, ¿Qué es lo que hace falta para llegar a la cumbre? El montañismo y la escalada abarca todo, desde atacar senderos muy largos hasta escalar impresionantes paredes de rocas heladas. Los expertos en disciplinas deportivas concuerdan que se necesitan cuatro elementos importantes para alcanzar objetivos en el crecimiento del alto rendimiento: Un buen estado físico, conocimiento técnico, indumentaria necesaria, quizá lo más importante, una mentalidad adecuada para enfrentarse al reto.

Cuando se trata de elevar nuestro nivel o crecer en nuestra área espiritual la mentalidad, el carácter y nuestra dependencia total a nuestro Dios son factores importantes.

El desafío de trabajar en nuestros pensamientos para alinear nuestra mentalidad al señorío de Cristo, dejando que nuestro carácter se pula por medio de las circunstancias y personas, pero sobre todo el poder transformador de su Santo Espíritu.

Los individuos que peregrinan en esta vida sin objetivos claros de crecimiento en su vida espiritual necesitan analizar tres tipos de jugadores que menciona John C Maxwell en su libro “Las 17 leyes incuestionables del trabajo en Equipo” sobre la oportunidad del cambio en el contexto del crecimiento en la vida espiritual:

• Los individuos que no quieren la pelota (No quieren Cambios).
• Los individuos que quieren la pelota pero no deberían tenerla (No se percatan que requieren cambios).
• Los individuos que quieren la pelota y deberían tenerla (Prestos para el cambio y ejecutan cambios).

Sin lugar a dudas la mentalidad, el enfoque, nuestro carácter y la disposición de realizar cambios para elevar nuestro nivel son componentes importantes pero hay dos aportes valiosos que podemos analizar e incorporar para seguir creciendo espiritualmente:

Convertirnos en catalizadores espirituales: Un catalizador es alguien que activa y acelera el proceso de cambio y transformación espiritual en la vida de otros. Discernimiento, sabiduría, verdad, presencia, poder.

• El catalizador espiritual añade valor a su vida, su entorno, acelera el cambio con motivaciones de implantar excelencia, diligencia, desarrollo, capacidad de enfoque a largo plazo, proactividad en resultados, eficientes, creativos, entre otras cualidades que se pueden explorar.
• El carácter es lo más importante para crecer espiritualmente pero no es lo único, si le añadimos al carácter, capacidad, compromiso, constancia, y cohesión, estos elementos nos pueden ayudar a elevar nuestro nivel en el desarrollo el caminar con Cristo y nuestro entorno.