Heredero y coheredero

Veremos la otra parte de la moneda como te comentaba ayer. En la parábola se nos habla de otro hijo, este hijo era el hijo mayor, él cual se quedó en casa, pero igual que el hijo menor… estaba perdido.

Cuando a este hermano mayor los siervos le cuentan de la gran fiesta que están haciendo en nombre de su hermanito, él inmediatamente se enoja, se llena de ira y dolor, sale de la casa, yo creo que queriendo igualmente huir, pero al igual que con el hijo menor, este padre sale de la casa y encuentra a este hijo lleno de enojo y le ruega que vuelva a entrar a su hogar, pero él no acepta y le hace un reclamo, le dice a su padre que no le parece justo, que, todos los años sirviéndole, nunca desobedeciéndole ni deshonrándolo, no entendía porque para él no hubiera ni un cabrito pero para su hermano que había derrochado su herencia con prostitutas y demás ¿Cómo era posible que para él hubieran hecho fiesta y matado al becerro más gordo? Y el padre le responde: “hijo, tú siempre estás conmigo y todas mis cosas son tuyas, pero era necesario hacer fiesta y regocijarnos, porque este tu hermano estaba muerto y ha revivido; se había perdido y ha sido hallado”.

Vemos que el hermano mayor estaba enfadado por las cosas materiales, igualmente que el hijo menor, que al comienzo solo le intereso el dinero de su padre, ambos estaban perdidos, uno dentro de casa y uno fuera, pero ambos estaban perdidos.

Es posible estar en la iglesia, cantar, dar tus diezmos, pero tener tu corazón a kilómetros de distancia del corazón del Padre…

De la parábola no se nos habla más, allí queda, no sabemos si este hijo entre nuevamente a la fiesta para ver a su hermano y regocijarse junto a la familia. Esa fiesta significa la fiesta que habrá en el cielo cuando todos vivamos en el paraíso.

Reflexión

Jesús cuando contó esta parábola, nos estaba diciendo que Él es nuestro hermano mayor, el primogénito entre todos los hermanos, Él le dio la vuelta a esa parábola, porque Él fue el hermano mayor que no se quedo en casa, sino que fue a buscarnos a ese “país” o lugar en el que decidimos estar para rescatarnos y llevarnos nuevamente a nuestro hogar y ese hogar es la presencia de nuestro ABBA PADRE, que como ya sabes… te da nueva vida, te llama hij@, te libera de la esclavitud y te dice que te ama.

No perdamos la oportunidad de traer gente a su hogar, y ¿Cómo lo hacemos? Hablando de ese amor que nos buscó y nos rescató a nosotros; no ignoremos las reglas que nos dejó nuestros Padre, rechaza hoy seguir llevando la vida que tenías, una vida llena de vicios, borracheras, sexo casual y demás, lo único que nos causa llevar una vida así es tener vacíos y nos convierte en ese hijo prodigo.

Ponle a ese hijo tu nombre y analiza cuál de los dos eres, porque la realidad, es que somos alguno de ellos… tú eliges si regresar o quedarte, recuerda siempre que Dios te AMAAA y te amará siempre, Él siempre tiene sus brazos abiertos para ti, ¡te llama mi príncipe! ¡te llama mi princesa! La niña de mis ojos

Espero este plan haya sido de bendición para tu vida, te mando un saludo y espero que Dios te bendiga y acompañe hoy y siempre.

Con amor Cristian.