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“Ya No Somos Esclavos del Temor”

El temor de hecho se menciona en la Biblia en muchas ocasiones. Dios sabía que como seres humanos lucharíamos contra esta emoción. Para algunos de nosotros tal lucha es una lucha diaria. Para otros es una pesadilla.

¡No se dé por vencido! La esperanza está en una Persona—se llama Jesucristo, nuestro Salvador. Él es nuestra Paz. Es nuestra Torre Fuerte. Es nuestro Auxilio. Es nuestro Lugar de Reposo. Es nuestro Escudo. Es nuestro Libertador.

Ayer recordamos que somos grandemente amados. La Escritura enseña, “En el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor” 1 Juan 4:18. ¡Qué tal promesa! ¡Qué Salvador!

Me encanta la canción “Ya No Soy Esclavo” de Bethel Music y es por eso que le animo a escuchar la letra: “Ya no soy esclavo del temor / Yo soy hijo de Dios.” ¿Cree en esas palabras? Voy a hablar fuerte y claro: Usted es un hijo de Dios. Descanse en eso. Una vez más digo, esa es su identidad.

La canción también dice, “Tu amor ahogó todo el temor.” Tenemos la promesa que, “el perfecto amor echa fuera el temor” 1 Juan 4:18. No sé de usted, pero yo necesito recordar esto—vez tras vez. ¿Dios me ama perfectamente? ¡Sí! ¿El perfecto amor echa fuera el temor? ¡Sí! ¿En verdad cree que Dios le ama? ¿Perfectamente? ¿Apasionadamente? ¿Sin vergüenza? ¿Incondicionalmente?

Sé que responder estas preguntas no es fácil, pero mañana hablaremos sobre por qué confiar y creer en Su perfecto amor puede conducir a un avance en nuestra lucha con el temor. Pero por ahora simplemente diga esto en voz alta: “el perfecto amor echa fuera el temor.” Dígalo otra vez. Párese y camine por su sala de estar y su cocina, o si está en su automóvil, grítelo. Medite en esta verdad a lo largo del día.