Dios es _______Muestra

Dios está aquí

“… Y tengan por seguro esto: que estoy con ustedes siempre, hasta el fin de los tiempos.”Mateo 28:20 NTV

Dios siempre ha querido tener una relación con los seres humanos y vemos que ese deseo se manifiesta en diferentes maneras a lo largo del tiempo.

En el principio, Dios vivió y caminó junto a Adán y Eva en el Jardín. Al ellos pecar, se rompió nuestra relación con Él pero no detuvo Su plan de estar cerca nuestro.

Dios Padre envió a Jesús a la Tierra para restaurar nuestra relación con Él y en una de las últimas declaraciones de Jesús ahí, promete estar siempre con nosotros. Incluso mejor que eso, Él promete a Sus seguidores que recibirán al Espíritu Santo, quien sería Dios en nosotros.

Cuando seguimos a Cristo, el Espíritu Santo de Dios no está simplemente con nosotros, Él está dentro de nosotros. En el Antiguo Testamento, las personas debían ir al templo para experimentar la presencia de Dios. Pero ahora, cuando aceptamos a Jesús, somos templos donde mora el Espíritu Santo de Dios.

Todo el tiempo, Dios quiso estar cerca de nosotros y, a través de Jesús, eso pudo ser nuevamente una realidad. Aunque esperamos ansiosamente el día en que Dios renueve todo para poder vivir con Él en Su reino perfecto, no estamos esperando ociosamente hasta que eso suceda. Dios nos ha dado trabajo.

Desde el principio, Él ha querido que los humanos gobiernen sobre la creación. Nos ha dado dones y asignaciones para llevar a cabo Su obra mientras estamos en la Tierra, de modo que la salvación no es solo un boleto al cielo, es una invitación para trabajar en traer más del Cielo a la Tierra.

Y mientras lo hacemos, no estamos trabajando en nuestro poder débil. Nos asociamos con Dios, confiando en Su Espíritu en nosotros para hacer cualquier cosa. Lejos de Dios, nada podemos hacer, pero como templos del Dios Viviente con Su Espíritu morando en nosotros, podemos hacer más de lo que imaginamos.

Con frecuencia nos vemos tentados a pensar que Dios es alguien distante que está en el Cielo, incluso lo llamamos “el de arriba.” Pero nuestro Dios está aquí.

Cuando sabemos que la presencia de Dios está con y en nosotros, podemos trabajar en el propósito que Él tiene para nosotros, compartiendo las Buenas Nuevas con otros y trayendo más de Su bondad aquí a la Tierra.

Ora: Dios, gracias porque al invitar a Jesús a mi vida, no sólo estás conmigo sino, ¡en mí! Te pido que Tu Espíritu Santo me guíe y dirija hoy. Muéstrame cómo traer más de Tu reino aquí a la Tierra, y gracias por asociarte con los seres humanos para hacer Tu voluntad. Confío en Ti y Te pido ser hoy más consciente de Tu presencia. En el nombre de Jesús. Amén.

Desafío: Al postrarte hoy ante la presencia de Dios, presta especial atención a cualquier cosa que sientas que el Espíritu Santo te está motivando a hacer y ¡pídele que te dé la valentía para hacerlo!