SalvaciónMuestra

Resiste mientras corres

Por tanto, también nosotros, que estamos rodeados de una multitud tan grande de testigos, despojémonos del lastre que nos estorba, en especial del pecado que nos asedia, y corramos con perseverancia la carrera que tenemos por delante. Fijemos la mirada en Jesús, el iniciador y perfeccionador de nuestra fe.


Ray Kroc, el legendario CEO de McDonald's, mantuvo una declaración elaboradamente enmarcada de Calvin Coolidge en la pared de su oficina. Era la cita inspiradora favorita de Kroc:

· Nada en el mundo puede tomar el lugar de la persistencia.

· El talento no lo hará; nada es más común que los hombres fracasados con gran talento.

· El genio no lo hará; el genio no recompensado es casi un proverbio.

· La educación no lo hará; el mundo está lleno de vagabundos educados.

· La persistencia y la determinación por sí solas son omnipotentes.


De hecho, cuando Kroc era CEO de McDonald's, la oficina de cada ejecutivo tenía esta declaración enmarcada en la pared. Puedo entender por qué, me encanta esta cita también. La resistencia es simplemente uno de los rasgos más vitales que cualquiera puede tener. Si tienes resistencia, compensarás muchas otras limitaciones.


Ciertamente necesitamos resistencia en la vida espiritual. Para todos nosotros, hay momentos en que nos cansamos y desanimamos. Luchamos con el pecado y las adicciones. La gente nos decepciona. Las iglesias están llenas de personas imperfectas. Nuestras oraciones no reciben respuesta o no obtenemos la respuesta que queremos cuando la queremos. El matrimonio puede ser difícil. La crianza de los hijos puede ser abrumadora. Luchamos contra el dolor físico o la enfermedad mental.


La vida es dura, esto no es el cielo, por lo tanto necesitamos resistencia. Para perseverar Dios nos da tres principios vitales: tomar aliento de otros que resistieron, deshacerte de cualquier cosa que te detiene, y especialmente, fijar tus ojos en Jesús. Jesús soportó tiempos difíciles y si fijamos nuestra mirada en Jesús, nosotros también podremos soportarlos.


Tres sugerencias prácticas que ayudan a mantenerte enfocado en Jesús:

1. Tómate un tiempo sin prisas para reunirte con Jesús todos los días. Deja ir otras cosas, pero no descuides el tiempo con Jesús. Es tu mayor privilegio.

2. Practica sentir la presencia de Dios durante todo el día. Él está allí contigo todo el tiempo. Vive en su presencia. Habla con Él. Acércate.

3. Cántale a Él. La música de adoración es poderosa y transforma el alma. Te ayuda a mantenerte enfocado en Cristo.
«Corramos con perseverancia la carrera que tenemos por delante».