CompasiónEjemplo

Normalmente en un día rutinario prestamos poca atención a lo que Dios ha puesto a nuestro alrededor, no reflexionamos lo maravilloso que es abrir el grifo y obtener agua, tener gas o electricidad, incluso tener dispositivos electrónicos que nos permitan meditar sobre la Palabra de Dios como justamente ahora lo estás haciendo, es decir, nuestra rutina ha quitado relevancia a lo que deberíamos considerar como una bendición. 

¡Ok, Bruno! puedes decirme, ¿es que acaso debo de dar gracias cada día por cada detalle que rodea y bendice mi vida? La respuesta es: ¡Si! Verás, el valor que le damos a nuestra vida esta compuesto no solo de cosas vistosas o grandes, sino de diminutos detalles que hacen que todo este interconectado y sucedan cosas hermosas cada día. Quizá nunca hemos reflexionado a lo largo de nuestros días o años, que cada detalle que hemos vivido, que cada cosa que hemos poseído, que cada persona que hemos amado, o cada disgusto o adversidad que hemos atravesado, hacen de nosotros la persona que somos ahora; sería imposible pensar que podríamos ser los mismos sin alguno de esos detalles que mencioné anteriormente. 

Ahora, en el plano espiritual, Dios nos ha llenado de esos pequeñísimos detalles que han hecho de nuestra vida en Cristo lo que más amamos, y ¿sabes? no es porque le sobrara algo, sino que nos dio de sí mismo por amor y compasión a nosotros, no me mal interpretes, no me refiero a que "nos tiene lástima" a que Él no da sobras, ¡no! de ninguna manera, sino todo lo contrario. Tuvo tanta compasión por ti y por mí y es tan grande el amor que nos tiene que entregó a Jesús para que fuéramos redimidos. Compadecerse de nosotros y saber que no podríamos ni en un millón de siglos obtener la vida eterna con nuestras capacidades fue lo que movió su corazón a compadecerse por nuestras fallas y pecados. 

No hay detalles insignificantes, solo las más finas pinceladas que hacen de la obra de arte más hermosa de Sus manos, lo más preciado para Dios, sin esas pinceladas, aparentemente imperceptibles, nosotros simplemente seríamos nada.