Descanso Para Los CansadosMuestra

¿Por qué venir a Jesús ofrece la esperanza de descanso para los cansados?

La respuesta viene empaquetada en la siguiente directiva que Jesús dio a las multitudes: “Toma mi yugo sobre ti” (Mateo 11:29).

Cuando venimos a Jesús, recibimos Su yugo y, como un buey que ara el campo, debemos someternos a su liderazgo. Ya no somos el amo y comandante de nuestro destino, sino como los primeros discípulos en Evangelio de Mateo que fueron convocados por Jesús (Pedro y Andrés), escuchamos y obedecemos los comando de "Síguelo" (Mateo 4:19). Este yugo, sin embargo, se describe luego como fácil:

“Porque mi yugo es fácil y ligera mi carga” (Mateo 11:30).

La palabra griega chrēstos, que aquí se traduce como "fácil", se traduce mejor como "bien ajustada o personalizada hecho." Un yugo mal ajustado puede agitar y desgastar al buey en medio de su trabajo, pero el yugo fácil es el que está perfectamente formado para el discípulo que lo sigue. Después de todo, Él es el Creador de todas las cosas y mejor conoce nuestras necesidades. El salmista describió esta atención a nuestra necesita de esta manera:

“El Señor se compadece de los que le temen. Porque Él mismo conoce nuestro marco; Él recordando que somos polvo” (Salmo 103: 13-14).

Seguir a Jesús y tomar Su yugo no es un paseo por el parque. Implicará sacrificio, obediencia y sumisión a la voluntad del Maestro. Sin embargo, es una sumisión gozosa a la aquel que nos creó, nos cuida íntimamente y nos conoce mejor.

¿Cómo aprendemos a someternos al yugo fácil de Jesús como nuestro Maestro?