Prosperar en la soltería: Segunda parteMuestra

Día 2 

¿Primero Dios y luego el café?

¿De dónde estás recibiendo tu dosis diaria?

A diario, mucha gente toma múltiples vitaminas o medicinas. ¡Durante esta pandemia muchos, estamos haciendo un esfuerzo extra para mantener nuestra inmunidad en control!  

Para todos mis amantes del café, ¡pueden identificarse con esto! Necesitamos una taza de café todos los días, 24x7x365. Soy el tipo de persona que necesita café antes de cualquier reunión o plática. ¡Qué risa! Algunos de nosotros dependemos de nuestra dosis diaria de café.

¿Cuántos de nosotros nos sentimos mal cuando no tenemos nuestra dosis diaria de oración, tiempo a solas con Dios y lectura de la Biblia? No sé ustedes, pero si me pierdo mi oración matutina antes de empezar el día, ¡todo mi día es una locura! 

¿De dónde estás recibiendo tu dosis diaria?

¿Tomas una dosis diaria de duda, pesimismo, celos, temor, desobediencia, envidia, inseguridad, depresión, indecisión, nimiedad, baja autoestima, ira o frustración? 

¿Aceptas la dosis de chisme, murmuración o mentira de tu amigo?

¿Le estás permitiendo al enemigo contaminar tu mente con miedo en vez de permitirle a Dios hacer cosas positivas en tu espíritu?

¿Tomas una dosis diaria de dudas sobre tu destino?

¿Estás tomando una dosis diaria de dudas sobre si te casarás alguna vez?

Hoy el mundo se encuentra en conmoción lleno de incertidumbre, confusión, tristeza y temor. Cada persona ha sido afectada. No importa tu color de piel, el estatus, la fama o el dinero. Todos somos afectados de alguna manera.

El enemigo quiere infundirte con temor y mentiras que tú nunca conocerás a tu pareja dada por Dios. El enemigo quiere infundir soledad, depresión y desaliento. 

Podemos poner nuestra confianza en un Dios que nunca falla. Servimos a un Dios que puede cambiar las cosas incluso en un segundo. La mejor dosis que necesitamos ahora es JESÚS.

El reto de hoy: Encomienda tu mañana con declaraciones y decretos positivos.