7 Días de la Historia de Navidad: Un devocional Familiar de AdvenimientoMuestra

Jesús, no sólo, es el Hijo de Dios, sino que también tuvo padres durante Su tiempo en la tierra. El padre de Jesús, José, lo adoptó en la familia del linaje de David, y Su madre, María, también era de la línea de sangre de David. En caso que te preguntes, ¡este David es el mismo niño pastor que venció a Goliat! ¿Puedes creerlo? Jesús se convirtió en un nieto lejano (veintiocho generaciones) de David, cumpliendo la profecía dicha cuentos de años antes sobre el Mesías que habría de venir como descendiente de David (2 Samuel 7:12-16).

La gente que vivía cuando Jesús nació sabía quién era David. Él nació para ser rey y escribió el libro de los Salmos. Pero aún más importante, la fe de David creció, y fue conocida como " un hombre de acuerdo al corazón de Dios" (1 Samuel 13:14) Siempre que Jesús era llamado "Hijo de David" en la Biblia, era por la gente que tenía fe en ese Jesús, prometido Mesías, o el tan esperado Libertador. Ellos creían que Jesús tenía el poder de liberarlos de sus sufrimientos y enfermedades.

Actividad familiar:Prepara un postre especial por anticipado, pero ¡no le digas a tus niños! Primero cúbrele los ojos. Luego, guíalos a través de la lista sensorial. Antes que traigas cada objeto, pregúntales si confían en ti. Toma una vela, u otra cosa aromática y pregúntales a qué huele. Luego de esto, guíalos al baño donde se lavarán las manos. Por último, guíalos a la cocina. Pídeles que abran la boca. ¡Ponles un pedazo de su postre favorito dentro! Sácales la venda. Pregúntales cómo se sintió estar vendados. ¿Estaban asustados? ¿Confiaban en ti? Usa este ejercicio para conversar sobre poner tu fe en Dios aún cuando no sabes dónde te está llevando.

Pregunta para Reflexionar en Familia:

•¿Qué significa poner tu fe en alguien?

•¿Puedes pensar en un ejemplo de cuando pusiste tu fe en Jesús y Él te liberó