El Poder en la Debilidad de la CruzMuestra

Poder en la Debilidad

Ante el ruego de Pablo y también el nuestro de que el Señor quite el dolor punzante que nos mantiene debilitados. Dios nos lleva a una mejor opción; "conserva la espina". En otras palabras el Señor le dijo a Pablo y también a nosotros, "si conservas la espina, yo le anadiré gracia". Esa no es la respuesta que quería Pablo y quizás tu tampoco. Aunque parezca una mala opción, es la única disponible. "Bástate en mí gracia; porque mi poder se perfecciona en tu debilidad"

La Palabra "Bástate, significa "es suficiente" significa que no necesitas nada más que la gracia. 

Mientras vivas, y transites por el camino de la cruz, experimentarás punzantes dolores que te debilitarán, porque decidí que nunca voy a sacar esa espina, pero la gracia que te daré por aceptar esta opción, será suficiente para soportar el punzante dolor. Y dado esto, tendrás la alegría y el gozo inefable de seguir siendo útil para mi Reino, de tener mi amistad, mi cercanía, mi verdad y todo lo que soy para recompenzar tu sufrimiento y momentáneo dolor. Y la debilidad que sientes, será solo el puente a través del cual yo te otorgo mi poder.

Si nuestra experiencia de vida no se altera, si siempre estuviésemos cómodos, si no fuésemos tentados y debilitados, confiaríamos en nosotros mismos, nos engrandeceríamos y entonces realmente nos debilitaríamos y las maravillosas experiencias con el cielo se arruinarían. El poder de Dios será sobre nosotros perfecto, a través de la humillante experincia pública de nuestra debilidad.

Pablo, no solo acepta la opción, sino que la comparte públicamente y le gusta. No oculta sus debilidades, porque no se ve amenazado por ellas. Y Pablo entiende que hay aún más poder en narrar una historia diferente a la que los críticos quieren escuchar. Y que la idea de Dios, siempre supera la suya. Su sufrimiento punzante se vuelve alegría y su debilidad en glorioso poder. 

Hoy el Señor te dice: "Mi gracia es suficiente para ti que te haz sentido incapaz, abrumado, desalentado y derrotado. Yo seré victorioso por ti, Cuando estés confundido, Yo estaré lúcido por tí. Cuando tengas miedo, Yo te defenderé. Mi gloria se derramará sobre tí y mi unción fluirá a través de tí. Lo único que te pido es que traigas a Mí tu debilidad, y Yo me comprometo en darte Mi poder".

Cada vez que sientas el dolor de tu aguijón recuerda esta palabra: "Por amor de Cristo me gozo en mis debilidades, porque cuando soy débil, entonces soy fuerte".

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