Es PersonalMuestra

Cuando tomas la decisión de creer y seguir a Dios, Él te da la bienvenida a Su familia y te conviertes en uno de los hijos de Dios. Si creciste con tus dos padres, ser parte de una familia es algo que se da por sentado fácilmente, pero si creciste en un hogar dividido o sin padres, ser parte de una unidad familiar es una experiencia que se anhela.

Haz una pausa y piensa en lo que significa la familia para ti. ¿Será la sensación de seguridad y protección? ¿Quizás el consuelo o la familiaridad? Tal vez sea solo el sentido comunidad y saber que no estás solo. Ahora, piensa en lo que significa ser bienvenido en la familia de Dios como Su hijo. Antes de continuar, tómate un momento para orar y agradecer a Dios por la oportunidad de ser parte de Su familia.