Perfecta Paz Muestra

En el diccionario de la RAE (Real Academia de la lengua española) una de las definiciones de paz es ausencia de ruido. De alguna manera,  implica que no hay distractores que roben la tranquilidad. 

Uno de los principales distractores que atentan contra nuestra paz, son nuestros propios pensamientos. 

¿Te ha pasado? Intentas guardar la calma, pero tu mente se hace escenarios hipotéticos que te sacan abruptamente de un estado de quietud, o genera diálogos internos que te llevan a la desesperanza en vez de a la Fe. Allí está el centro de la batalla del cristiano… ¡en la mente! 

El antídoto, es hacer el hábito de confiar en sus promesas por encima de nuestros pensamientos. Llenarnos de verdad para desechar la mentira. 

En Isaías 26:3 en la versión de la Biblia PDT dice “Tú le das paz a los que se mantienen pensando en ti porque en ti han puesto su confianza” analicemos este versículo por partes:

1) Tú le das paz: viene del original (שָׁלוֹם shalowm). Describe, una paz integral que solo puede venir de Dios. Abarca alma, mente, cuerpo, espíritu. Implica salud, contentamiento, reposo, prosperidad en las relaciones, en el trabajo etc.…todo esto contenido en una sola palabra. 

Es el saludo judío por excelencia y significa: “Que esa paz perfecta de Dios te sea otorgada”. Como lo mencioné antes, esa paz solo puede provenir de Dios y,por ende,  no está sujeta a circunstancias humanas. 

2) A los que se mantienen pensando en ti: en el original es (סָמַךְ camak)  implica que, estando  en movimiento o en descanso, la persona puede conservar una actitud de reposo, así como los que viajan sentados en una cómoda silla, mientras el automóvil va rodando. 

Mantenerse pensando, no significa recitar versículos "en automático" .Significa, más bien, vivir creyéndolos.  Atesorando cada una de las palabras palabras en nuestro corazón, poniéndolas por encima de la fluctuación de nuestra mente. 

No olvidemos que, para poder vivir seguros en la Palabra, el primer paso es conocerla. 

3) Porque en ti han puesto su confianza: esta es la explicación, la razón, el por qué alguien es capaz experimentar Perfecta Paz. 

Es porque Confía! Confía en su soberanía, en sus verdades, en su amor. 

¿Pero podremos lograr confiar sin conocer?

Confiar verdaderamente no es un asunto de un día, ni de programación neurolingüística. Es una jornada. Solo somos capaces de creer  en aquello o en aquél con quien nos hemos relacionado. 

Por ende, si queremos confiar más necesitamos conocer más, relacionarnos más, interactuar más con nuestro Señor. Y eso, es un paso decidido y voluntario. 

Hoy es el último día de este devocional y a través de él, hemos visto aspectos que nos invitan a creer sin reservas en la guía de nuestro Señor. A confiar que somos victoriosos cuando avanzamos obedientes, a su voz y a su ritmo. A gozarnos en su  sonrisa que nos afirma.  También a comprender que los tiempos de espera y de silencio, pueden ser el inicio de una etapa de perfeccionamiento y de mayor madurez, que nos  prepara,  para remontar vuelo, utilizando sabiamente nuestra fuerza.

¿Estás listo para confiar aún más en tu Señor  y experimentar una vida en Perfecta Paz? ¿Qué otros aspectos más, tú pudieses mencionar que han sido importantes para ti de comprender?