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Cuándo tus sueños no funcionan

A veces confundimos nuestras esperanzas y nuestros sueños con los de Dios, y nuestros cerebros (y corazones) harán cualquier cosa para convencernos que son la misma cosa. A medida que crezco más en mi fe, estoy descubriendo que los sueños que Dios tiene para mi vida suelen ser diferentes de lo que yo planeo, pero siempre terminan siendo mejores.

Dios no siempre nos da lo que esperamos o lo que queremos, pero Él nos da lo que necesitamos. A menudo, hablamos de los sueños atrasado (algo que toma más tiempo de lo que esperábamos). ¿Qué pasa cuando nuestros sueños simplemente erran el tiro y nunca se realizan? Si lo que anhelamos y deseamos no están funcionando según lo planeado en este momento, tal vez Dios está haciendo algo diferente que ni siquiera esperamos. Tal vez nuestro plan B o C en realidad es el Plan A de Dios, y somos demasiado tercos para darnos cuenta en este momento.

La redención no se trata solo de entregar a Dios nuestras cosas malas (nuestros pecados y errores), también se trata de dejar ir lo bueno incluyendo nuestras esperanzas y nuestros sueños para el futuro. La redención nos da miedo porque ya no tenemos el control. Sin embargo, cuando entregas tus sueños, encontrarás que Dios tenía un mejor plan todo el tiempo.

Jordan Wiseman
Equipo de YouVersion