¡CÁSATE!Muestra

"A" -  Aprende a esperar.

¡Cuándo conocí a Dios le pedí que fuera ÉL quién escribiera mi historia de amor! ¡No quería equivocarme ni salir lastimada! ¡Así que decidí dejar mis sentimientos en las manos correctas!

Hubo muchas circunstancias en ese proceso llamado “Espera” pero estoy convencida que ese proceso es más que necesario.

En la espera somos formados y moldeados. Es en ese tiempo de “Espera” dónde nuestro corazón debe latir al 100% por Dios. Recuerdo que fue en el momento en el que más conectada estaba con Dios cuando fue ÉL quien permitió que conociera a mi esposo.

A muchos nos cuesta esperar y es que vivimos en un mundo donde aparentemente todo es “Fácil y Rápido”. ¡Para algunos esperar puede llegar a ser una tortura!

Y si a eso le sumas las voces de tu alrededor “Para cuándo”; “Se te está pasando el tren” “¿Cuántos años tienes?”; “Aún no te gusta nadie” Etc, etc, etc. ¡¡¡Definitivamente la espera se vuelve eterna!!! Pero en medio de la espera lo mejor que puedes hacer es servir a Dios. Literalmente puedo decir que conocí a mi esposo “Sirviendo a Dios”. El servir te guarda, te mantiene enfocado en el propósito que Dios tiene para ti.

Así que mientras esperas a la persona que Dios tiene para ti, lo mejor que puedes hacer es:
- Entrégale el control de tu área sentimental a Dios.
- Disfruta el tiempo de espera, déjate moldear por las manos correctas de “Tu creador”.
- ¡Sirve a Dios! Tienes un llamado.
Yo quería casarme con un hombre que amará a Dios con todo el corazón y que lo sirviera con todo su ser y es por eso que me determiné servir a Dios. Y “Mi esposo es la respuesta a mis oraciones”.

Recuerda que Dios nunca llega tarde y que en su tiempo “Todo es hermoso” ¡No vas a estar soltero por siempre, no es muy tarde!

Dios está trabajando en TU HISTORIA DE AMOR y cuando llegue el momento podrás disfrutar al máximo de la persona que Dios preparó para ti. Mientras tanto disfruta la espera….

Oremos juntos:
Amado Dios ayúdame a esperar por la persona correcta, sé que TÚ estas trabajando en mi vida y que tienes el control de mis tiempos, hoy te pido que me enseñes a enamorarme de ti y a servirte con todo el corazón. Amén.