Sueña en grande con Bob GoffMuestra

Cuando fallas épicamente, no estas solo. La biblia te da muchas personas con las que relacionarte. Toma a Abraham, por ejemplo. puedes leer en Génesis como continuamente siguió su propio camino sin consultar primero a Dios. Sin embargo Dios le dijo a Abraham que toda la familia de la fe mundialmente seria rastreada a través de él. David tuvo algunas caídas bastante épicas que todos hemos escuchado, incluyendo adulterio y asesinato. Sin embargo, la genealogía de Jesús vino a través de él. Incluso se describe como un hombre conforme al corazón de Dios. ¿Que tan loco es eso? 

Cómo una cultura, hemos enviado a los presidentes a empacar y pastores excomulgados por mucho menos. Moisés mató un hombre, por el amor de Dios, sin embargo, Dios lo eligió para entregar sus palabras en una tabla de piedra sobre cómo debemos vivir. Y luego él dirigió una nación a la tierra prometida. Dios nos muestra una y otra vez, que nuestras fallas no nos descalifican; estas nos preparan.

Verdaderamente, la mayoría de las personas están mas preocupadas por que otros las vean fallar que por fallar realmente. así que todos, en cierto punto, tratamos de actuar como si no nunca estuviéramos cayendo del todo. Todavía no he visto una publicación en redes sociales que muestre a alguien rescatando una relación o cediendo una tentación. No he visto una foto de un chico que se rinde a cincuenta pies de la cumbre o hace trampa en un examen o pierde los estribos o es auditado por el IRS o grita a su hijo. 

Nuestra de necesidad de validación puede ser un desastre con nuestras cabezas. Nos preguntamos, ¿somos los únicos que tienen grandes y pequeñas fallas en nuestros días? No se deje engañar pensando que usted es el único que tiene que atravesar dificultades. El fracaso crea una invitación que la falsificación siempre perderá. Romper un boleto o dos. Está bien. Del otro lado de un fracaso épico puede haber belleza y autenticidad igualmente épicas, que solo pueden nacer de la comprensión de nuestra desesperada necesidad de amor, gracia y ayuda.