Bajo La SombraMuestra

Un lugar secreto

Hace unos meses, con mi familia y unos amigos tuvimos el gran privilegio de pasar algunos días de descanso en el desierto de Atacama, Chile, un lugar fascinante. Hicimos una pausa de tecnología, porque queríamos desconectarnos totalmente del mundo, sin señal ni internet en los celulares. 

En una de esas tardes de mucho calor, fuimos a visitar una playa de arena blanca. Estábamos vestidos normalmente, sin intención alguna de meternos al mar. Luego de 45 minutos, empezamos a notar que el sol era tan fuerte que ya no lo podíamos soportar. Miramos a nuestro alrededor y, como no había sombra y ningún lugar donde refugiarnos del sol, decidimos volver a casa.

A la mañana siguiente, varios de nosotros despertamos adoloridos, nos dimos cuenta de lo mucho que nos había quemado el sol durante el corto tiempo en que estuvimos expuestos.  Yo estaba moreno, como si hubiese llegado del caribe, pero mi amigo de Inglaterra había quedado rojo como un tomate. 

Te preguntarás por qué te estoy contando esto. 

Esta experiencia me hizo pensar en lo que dice el Salmo 91: Dios tiene para cada uno de nosotros, sus hijos, un lugar donde habitar, donde refugiarnos, experimentar su protección, su cuidado y su consuelo; un lugar secreto bajo su sombra.

¿A qué lugar vas cuando estás angustiado o preocupado? ¿Alguna vez has pensado en Dios como un lugar en el cual refugiarte? 

Muchos vivimos preocupados y con temor, pero este salmo nos recuerda que, si hacemos de Dios nuestro refugio, no temeremos durante la noche ni durante el día. Si ponemos nuestra confianza en Dios, tan sólo con abrir los ojos seremos testigos de su justicia.