Oración EficazEjemplo

El Proceso de la Oración

Todos queremos que nuestras oraciones sean contestadas, y mucho mejor si la respuesta es siempre sí. El problema con esto es que nos empuja a tener un enfoque en el resultado y nos olvidamos que a Dios también le importa el proceso.

Poder entrar al Lugar Santísimo y conversar con el Creador de todo lo que existe, en el momento en que lo necesitamos, es un privilegio asombroso; considerando sobre todo que es uno de los beneficios que Jesús compró para nosotros con su muerte en la cruz.

Y aunque hemos revisado varias promesas y principios que nos ayudan a desarrollar una Oración Eficaz, estoy convencido que el proceso de orar y esperar en Dios es tan importante como la respuesta.

El tiempo que transcurre entre empezar a orar y recibir la respuesta es un tiempo que nos acerca a Dios, nos permite conocerlo más y también ser conocidos por Él. Recuerda que la motivación en su corazón desde el principio siempre fue tener una relación de amor con su creación más preciada: La humanidad.

Y la forma en que Dios responde es parte del proceso. Dios básicamente puede responder SÍ, NO, o ESPERA; y aunque no siempre será lo que quieras recibir siempre será lo que necesitas. Y la misma respuesta va dándole forma a nuestro corazón y nuestro carácter.

Es increíble que Dios siempre está obrando, aun cuando no podamos verlo.

¿Cuál ha sido la respuesta de Dios a tus últimas oraciones?

¿Qué crees que quiere hacer Dios en tu corazón en este tiempo?

¿Cómo puede cooperar con Él para seguir fortaleciendo tu fe?