¿Cómo tener un encuentro con Jesús?Muestra

Jacob

Dios escogió a la familia de Abraham como propia Suya. Le prometió bendición, sobreabundancia y una descendencia poderosa. Isaac fue el hijo de Abraham y con su nacimiento se comenzó a cumplir la promesa. Isaac tuvo dos hijos llamados Esaú y Jacob que por cosas de la vida eran mas enemigos que hermanos. En ese entonces el mayor, en este caso Esaú, recibiría la bendición de la primogenitura. Pero Jacob no quiso conformarse con la bendición de segundas, y por esta razón luchó toda su vida buscando la bendición mayor de Dios a tal punto de engañar a su papá y traicionar a su hermano. Años después cuando Esaú planeaba matar a Jacob, fue un encuentro glorioso que cambió todo para Jacob, su familia y su descendencia.  

Es importante entender que Esaú representa el hombre carnal, la naturaleza de Adán que cada persona lleva por dentro. Jacob representa el hombre espiritual, que también todos llevamos por dentro. Aunque parece que Jacob (el hombre espiritual) tiene más luchas que Esaú, Jacob es quien asegura vida eterna. El hombre carnal no puede recibir la bendición del padre, pues esta es para el hombre espiritual. 

Jacob trabajó por una esposa (Raquel) y terminó con cuatro (lo cual representaba riqueza, poder y bendición en esa época). Estas cuatro esposas le dieron 12 hijos a Jacob, quien vinieron a ser las 12 tribus de Israel. La angustia y prueba más grande, el momento más temeroso llevó a Jacob a tener un encuentro con Jesús. Jacob obtuvo la victoria cuando tuvo su encuentro.

Apreciado amigo, la punta de partida es un verdadero Encuentro con Jesús.