Amada por el Dios que ve mis necesidades más profundasMuestra

Ese soy yo, la respuesta a tus necesidades más profundas 

Muchos de nosotros vamos por la vida repitiendo los mismos errores una y otra vez. Nos sentimos atrapados en un círculo vicioso de una vida aburrida y automatizada. La rutina toma el control, nos ocupamos, y llenamos las horas de nuestras apretadas agendas con actividades interminables que prestan poca o ninguna atención a las necesidades más profundas de nuestro corazón.

La mujer samaritana también se sentía atrapada en un ciclo de relaciones fallidas que no eran la respuesta a sus necesidades más profundas. Ese día en el pozo, ella buscaba agua, una actividad típica, parte de su rutina diaria. El encuentro con Jesús la llevó a preguntarse que había estado reprimiendo durante años, preguntas que solo las personas valientes se atreven a hacer.

Los samaritanos diferían de los judíos en su adoración a Dios, mezclaban dioses paganos con el Dios judío. «Nuestros antepasados adoraron en este monte, pero ustedes los judíos dicen que el lugar donde debemos adorar está en Jerusalén». Finalmente pudo hacer esas preguntas que había rechazado por un tiempo tan largo y doloroso. ¡Ayúdame a entender cómo vivir, cómo adorar correctamente! Quizás eso es lo que falta en mi vida.

Él respondió amablemente a su pregunta: «Pero se acerca la hora, y ha llegado ya, en que los verdaderos adoradores rendirán culto al Padre en espíritu y en verdad, porque así quiere el Padre que sean los que le adoren» (versículo 23) NVI. Él agregó: «Dios es espíritu, y quienes lo adoran deben hacerlo en espíritu y en verdad» (versículo 24) NVI.

Ella sintió que su propio espíritu comenzaba a elevarse.

«Sé que viene el Mesías, al que llaman el Cristo —respondió la mujer—. Cuando él venga nos explicará todas las cosas».

A lo que Jesús declaró: «Ese soy yo, el que habla contigo…» (versículo 26) NVI.

Esta revelación la sorprendió. Toda su vida había buscado algo o alguien que pudiera llenar el vacío en su alma. Ella anhelaba valor y propósito. Tenía hambre de significado y verdad. Su profunda necesidad de seguridad, compañía y alegría la había llevado a los brazos de hombres que nunca podrían llenar el dolor en su alma.

¿Estás buscando significado, valor, propósito, verdad? Jesús te dice: «Ese soy yo. Soy la respuesta a tus necesidades más profundas. Te veo, estoy aquí para ti. Soy el camino, la verdad y la vida».

Para escribir en el diario

Tómate unos minutos y reconoce su presencia. Date cuenta de que Jesús es el agua viva que has estado buscando. Pídele que te muestre cómo su Palabra puede satisfacer tus necesidades más profundas. ¡Pídele que te llene con su presencia!