El Reto 30/30Ejemplo

Ciertamente, la palabra de Dios es viva y poderosa, y más cortante que cualquier espada de dos filos. Penetra hasta lo más profundo del alma y del espíritu, hasta la médula de los huesos, y juzga los pensamientos y las intenciones del corazón.  Hebreos 4:12

¡Bienvenido al Reto 30/30! Estás comenzando un viaje de 30 días que cambiará tu vida a medida que inviertas solo 30 minutos del día estudiando la Biblia durante los próximos 30 días.

Cuando realmente estudias la Palabra de Dios, descubres que eso es la clave para encontrar todo lo que estás buscando y todo lo que necesitas en la vida. La Biblia revela quién es Dios y el para que nos ha creado. La Biblia es la fuente de la Verdad, la sabiduría eterna y tiene el poder de transformarte a la imagen de Cristo. ¡Pasar tiempo con Dios estudiando la Palabra es lo más valioso que puedes hacer! 

No hay un plan específico que debas seguir para cumplir con éxito este reto. Este compromiso te animará al revelarte algunas de las promesas de Dios, dándote principios sencillos bíblicos para aplicar a tu vida. Pueden ser un punto de partida para entrar de lleno en la Biblia o puedes usar las Escrituras claves como tu enfoque para profundizar en la Palabra.

Si estás luchando en un área determinada de tu vida, como las relaciones, el manejo de tus emociones, la comprensión del plan de Dios para ti, el control de tus finanzas, etc., enfócate en las Escrituras que hablen de ese tema. O tal vez estés interesado en un libro de la Biblia que nunca hayas leído antes y quieras leerlo. Sea cual sea tu enfoque, no vas mal cuando tomas el tiempo cada día para meditar en la Palabra de Dios. ¿Entonces, estás listo para comenzar?

Practicando lo Aprendido:

Piensa en lo que esperas experimentar o lograr durante este reto. ¿Te estás enfocando en tener una relación más cercana con Dios? ¿Quieres elegir un tema como el amor, la fe, las finanzas, las relaciones o la oración para estudiar? Es importante tener una dirección en mente para seguir adelante. Pero recuerda: no hay una manera incorrecta de hacer esto mientras estés dedicando tiempo para estudiar la Palabra de Dios. ¡Abre tu corazón a Dios y espera que Su Palabra obre en tu vida!